Los aficionados a la pesca en el Lago de la Casa de Campo hacen una denuncia sorprendente. La crisis está dejando el estanque sin carpas. Está autorizada la pesca deportiva sin muerte, es decir que hay que devolver los peces al agua una vez capturados. De un tiempo a esta parte, dicen que hay una serie de pescadores furtivos que se llevan las carpas para comerselas.