El juez del caso Madrid Arena ha dado un plazo de cinco días al empresario Miguel Ángel Flores, principal imputado en la causa, para aportar el incremento de 100.000 euros de fianza que le impuso en mayo, al considerar insuficiente la escritura de una finca valorada en 15.915 euros.
El titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Eduardo López-Palop, que investiga la muerte de cinco jóvenes en una fiesta de Halloween el 1 de noviembre de 2012, acordó en mayo elevar la fianza de Flores de 200.000 a 300.000 euros, así como su comparecencia todos los días en el Juzgado.
En un auto, con fecha de ayer, el juez señala que la escritura de una finca de Castellón aportada por el promotor del evento "ni de lejos tiene valor suficiente" para cubrir la ampliación de la fianza, dado que está valorada en 15.915 euros, según fuentes jurídicas.
López-Palop acuerda, en el mismo auto, que Flores deberá continuar compareciendo diariamente en los Juzgados de la ciudad de Madrid y desestima la solicitud del empresario de ausentarse de la capital para desplazarse a Málaga del 4 al 25 de agosto. De este modo modifica la decisión que adoptó el 9 de julio de 2014 de acceder a la petición de Flores, con la oposición de la Fiscalía y de las acusaciones particulares.
El juez argumenta que los Juzgados de Marbella carecen del sistema informático Libe, por lo que resulta "imposible" el control diario de la comparecencia del imputado, "requisito esencial para su permanencia en libertad". López-Palop destaca que Flores está imputado por "unos hechos de extrema gravedad que exigen un control estricto por parte del Juzgado que instruye la causa".
Asimismo, el magistrado tiene en cuenta el argumento de la Fiscalía en el sentido de que no existiendo enfermedad grave u otro motivo personal o familiar relevante en la vida de Flores "no es en modo alguno necesario que se ausente de Madrid únicamente por motivos de ocio o vacación".