La leche chocolateada o sola, las galletas, los cereales y las tostadas son los principales alimentos que ingieren los niños madrileños de entre 9 y 13 años a la hora de desayunar, según se desprende del Estudio sobre los hábitos alimentarios en el desayuno de los escolares de la Comunidad de Madrid de marzo de 2011 realizado entre niños de entre 9 y 13 años.
La leche chocolateada es una constante en casi la mitad de los desayunos de los escolares de Madrid (47,1 por ciento), seguida de la leche sola (44,6), las galletas (30,4 por ciento) los cereales (28,9 por ciento) y las tostadas (8,6 por ciento) a las que sigue el zumo, pero ya sólo consumido por un 7,1 por ciento de los escolares encuestados.
Las magdalenas (consumidas por un 6 por ciento) son las siguientes en el ranking, seguidas de lejos por el bocadillo (82,9 por ciento), el pan (2,4 por ciento) y la tostada con mermelada (2,1 por ciento)
En la cola del listado, la manzana, con un 1,1 por ciento de seguidores; el bizcocho (1,2 por ciento), el queso (1,2 por ciento) o el bocadillo de jamón (1,4 por ciento).
Otros alimentos citados por menos del 1 por ciento de los menores son el café con leche, los churros, la arepa, el panquequeo el bocadillo de mortadela y queso.
Los lácteos son los indispensables en el desayuno de los menores en cuanto a tipo de alimento (93,5 por ciento de ellos los comen), seguidos de las galletas (30,4 por ciento) y los cereales (28,9 por ciento).
Resalta en este estudio que en ocho de cada nueve desayunos no hay presencia de fruta o zumo.
A media mañana, sin embargo, destaca el consumo del zumo (32,9 por ciento), el bocadillo (15,3 por ciento), el batido de leche (9,6 por ciento) y las galletas (9,1 por ciento). La fruta está en sexto lugar con un 5,5 por ciento de consumidores.
