La Policía Nacional ha detenido a un butronero que huyó al saltar la alarma de la joyería pero que, una vez se marcharon los agentes, intentó sin éxito terminar el robo, ha informado a Europa Press un portavoz de la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.
El primer intento tuvo lugar a las 2.30 horas del pasado sábado en un establecimiento situado en la madrileña Plaza de San Juan de la Cruz, que ha sufrido cuatro intentos de robo en los últimos meses, dos de ellos bajo el procedimiento del butrón.
Sobre esa hora, un grupo de jóvenes ladrones forzó las cerraduras de una peluquería adyacente a una tienda de compra venta de oro y relojes. Una vez dentro, comenzaron a taladrar la pared y practicaron un pequeño butrón de 15x15 centímetros, pero saltaron las alarmas.
Entonces, los ladrones huyeron rápidamente del lugar, salvo uno de ellos, a la postre el detenido, que se escapó escaleras abajo, saltó por la ventana del baño y se ocultó en el patio del inmueble. El 'caco' esperó a que los agentes se fueran del lugar tras precintar el establecimiento.
Así, volvió sobre sus pasos y reventó una ventanilla para entrar de nuevo en la peluquería, pero los ruidos fueron escuchados por un vecino, que llamó nuevamente a la Policía. De esta forma, los agentes apresaron 'in fraganti' al joven español Nabil Benamar B.A., que ya ha pasado a disposición judicial.
OTROS DOS BUTRONES ESE DIA
El mismo sábado, otro grupo de butroneros forzó la puerta de un domicilio situado en la calle Constitución de Alcobendas situado justo encima de una joyería, y entró en la vivienda.
En el cuarto de baño practicaron un agujero de un metro de diámetro, por el que pretendían saltar hacia el establecimiento joyero. Sin embargo, los cascotes que se desprendieron con el butrón hicieron saltar las alarmas sonoras de la tienda y los ladrones huyeron precipitadamente del lugar.
El otro robo tuvo lugar en la calle Pedro Laborde, en el madrileño distrito de Puente de Vallecas. Los 'cacos' forzaron la puerta de un cuarto bloque de viviendas contiguo a la Joyería Miguel Arribas, entraron en un cuarto de limpiezas forzando la puerta y desde allí efectuaron un butrón de 60 x 40 centímetros. Los delincuentes consiguieron acceder y desvalijaron la joyería.
La Policía Nacional de Madrid se ha hecho cargo de las averiguaciones. Todavía no se han producido detenciones y los agentes investigan ahora si las robos fueron cometidos por la misma banda.