La riqueza arqueológica de Cartagena llega a la capital con la exposición 'Arx Hasdrubalis. La ciudad reencontrada', que podrá verse en el Museo Arqueológico Regional desde este viernes y hasta el 8 de mayo, como ha señalado el vicepresidente regional, Ignacio González, tras inaugurar la muestra.
El museo, en colaboración con la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, muestra los resultados de las excavaciones arqueológicas acometidas en el bienio 2008-2009 en el cerro del Molinete de Cartagena (Murcia).
Esta exposición llega al museo fruto del intercambio y la cooperación cultural entre la Comunidad de Madrid y la Región de Murcia, relaciones que pretenden ser continuas en el tiempo, como han puesto de manifiesto el vicepresidente y consejero de Cultura y Deporte de Madrid, Ignacio González, y el consejero de Cultura y Turismo de la Región de Murcia, Pedro Alberto Cruz.
La muestra presenta la estructura urbana y la vida de una de las ciudades más esplendorosas del Mediterráneo occidental, fundada en cimientos cartagineses y elegida por los romanos por su privilegiado emplazamiento y su riqueza minera.
González ha destacado tras recorrer la muestra que es una ocasión irrepetible para que los madrileños conozcan una selección de los tesoros de las excavaciones arqueológicas realizadas en el cerro del Molinete de Cartagena que, por su naturaleza, en muy raras ocasiones han salido del emplazamiento.
Exhibe una selección de las piezas arqueológicas más significativas recuperadas en las recientes excavaciones, entre las que sobresalen pinturas murales, esculturas, capiteles toscanos, jónicos y corintios, epígrafes, monedas, pequeños instrumentos y cerámicas.
Con un hilo conductor marcadamente temático, se explica la historia de la arqueología en el cerro, uno de los accidentes orográficos que más ha caracterizado la topografía y fisonomía urbana de la ciudad de Cartagena en el devenir de los siglos y donde las diferentes culturas europeas han dejado su huella a lo largo del tiempo.
A mediados del siglo II a. C. fue denominado como Arx Hasdrubalis por Polibio de Megalópolis al ser éste el lugar donde levantó sus magníficos palacios el general cartaginés, fundador hacia 229 a. C. de una ciudad que, establecida sobre un precedente asentamiento ibérico, estaba llamada a convertirse en la réplica hispana de Carthago.