El brote de legionella detectado en Móstoles (Madrid) se ha cobrado su segunda víctima mortal, una mujer de 63 años que se encontraba ingresada en un hospital de Villajoyosa (Alicante), según ha informado hoy el Servicio Madrileño de Salud.
Este segundo fallecimiento se suma a la muerte, el pasado 7 de julio en el Hospital de Alcorcón (Madrid), de otra mujer, ésta de 87 años, que presentaba "múltiples patologías".
El brote de legionella detectado en Madrid se localizó en un vaporizador de un restaurante-marisquería de Móstoles, de los que se utilizan para refrescar el exterior de bares y restaurantes, según explicó la presidente madrileña, Esperanza Aguirre.
Este brote no guarda relación con otro detectado en un hotel de Calpe, en cuyas instalaciones de "spa" se ha hallado también la peligrosa bacteria Legionella, que recibe este nombre porque fue identificada por primera vez en 1977 en un hotel de Filadelfia en el que celebraban una reunión miembros de la Legión Americana.
En el caso del brote de legionella de Calpe hay 17 afectados y las autoridades han anunciado que las instalaciones reabrirán este fin de semana, aunque no el "spa" en el que se detectó el problema.
En lo que respecta al brote de Madrid, la Consejería de Sanidad del Gobierno de Madrid mantiene activado el protocolo de control y vigilancia de la legionelosis en la región para investigar 63 posibles casos (30 confirmados mediante la analítica de orina y el resto son casos sospechosos por sus síntomas).
De esos 63 pacientes ya han sido dados de alta 54, ha precisado hoy el Servicio Madrileño de Salud
