Unos 1.500 alumnos de la escuela de música del centro cultural de Sanchinarro no saben si podrán seguir dando clases a partir del 1 de julio. A la empresa que lo lleva ahora, Talía, se le acaba el convenio y no quieren que se acabe con las clases gratuitas y talleres que también ofrecen a los vecinos. Muchos ya están recogiendo firmas y se quejan de la falta de información.