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El Museo Lázaro Galdiano muestra desde este viernes una treintena de sus abanicos más lujosos en un recorrido histórico que arranca en el siglo XVIII, ha informado la institución a través de un comunicado.

La gran variedad de abanicos que atesoró José Lázaro son testigos de su busqueda incansable como coleccionista para encontrar piezas con las que obsequiar a su esposa, Paula Florido, desde que la conoció en 1901.

Se muestran obras tempranas, del primer tercio del siglo XVIII, donde las referencias al barroco clasicista son evidentes. Otra opción son los ejemplares en los que se va fraguando el gusto rococo que dio lugar al abanico galante, fiel reflejo de la vida refinada y placentera de los nobles y burgueses europeos del segundo tercio del siglo. El estilo neoclasico y la moda Imperio también tienen cabida en la muestra.

La muestra de esta selección de lujosos abanicos dieciochescos podrá verse hasta el 26 de enero. De manera paralela, el museo ha programado dos talleres para familias, donde podrán crear sus propios abanicos en los que contar una historia que ellos mismos ilustraran.