La niña recién nacida abandonada el 30 de diciembre pasado en la localidad madrileña de Algete tiene un tumor pulmonar congénito "posiblemente benigno", ha informado hoy el consejero madrileño de Sanidad, Jesús Sánchez Martos.
"Estamos a la espera del diagnóstico de los oncólogos", ha dicho el consejero esta mañana al término de un desayuno informativo organizado por el diario "Estrella Digital" al que ha acompañado al consejero de Presidencia y portavoz de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido.
La pequeña fue hallada el 30 de diciembre en un cuarto de contadores de un edificio de Algete con síntomas de hipotermia y trasladada de inmediato al hospital Infanta Sofía de San Sebastián de los Reyes, donde permaneció en una incubadora, y el día siguiente fue remitida al Gregorio Marañón.
Sánchez Martos ha dicho que la niña ha sido perfectamente atendida en el Hospital Gregorio Marañón, donde permanece ingresada, que "está perfectamente y ha mejorado muchísimo", aunque ha precisado que "la imagen que tenía en el pulmón parece ser un tumor congénito, posiblemente benigno, en la pared costal".
El consejero ha destacado el trabajo de los neonatólogos que la atendieron en un primer momento y ha recordado que "fue abandonada con el cordón umbilical sin ligar, lo que supuso una fuente importante de infección, que fue controlada con antibióticos".
Fuentes de Sanidad ya informaron este martes de que tras superar problemas respiratorios iniciales causados por el frío que pasó durante su abandono, la niña ya no necesita asistencia respiratoria.
El servicio de Emergencias 112 de la Comunidad de Madrid recibió hacia las cuatro de la tarde del 30 de diciembre un aviso de que en el número 6 de la calle Pazos de Algete había un bebé abandonado, por lo que se avisó a la Guardia Civil y al Servicio de Urgencia Médica de Madrid (Summa), que hallaron a la niña cubierta con una chaqueta aunque presentaba signos de hipotermia en manos y pies.
Las fuerzas de seguridad prosiguen la búsqueda de los progenitores de la menor.
Mientras no aparezcan, la tutela de la menor seguirá en manos de la Dirección General de Familia de la Comunidad de Madrid.
Cuando la niña reciba el alta, pasará a una familia de acogimiento de urgencia de entre las que la administración regional tiene seleccionadas.
Si no aparece ningún familiar de la niña en la investigación ya iniciada, que se desarrollará de forma paralela a este proceso, en tres o cuatro meses la bebé sería acogida de forma definitiva por una familia de adopción.