Los vecinos del número 7 de la calle Tribulete, en el barrio madrileño de Lavapiés, han presentado la primera querella colectiva en España por acoso inmobiliario y coacciones contra la socimi Elix Rental Housing, actual propietaria del edificio.
Respaldados por el Sindicato de Inquilinas e Inquilinos de Madrid, los afectados denuncian que, desde que la empresa mostró interés por adquirir el inmueble a principios de 2024, los residentes comenzaron a sufrir una campaña de presión para abandonar sus casas, por lo que han acusado a la empresa de recurrir al "mobbing inmobiliario" como estrategia para facilitar el reemplazo de inquilinos por turistas.
La compra del edificio se formalizó en marzo del año pasado, y en noviembre comenzaron unas obras mientras las familias seguían viviendo allí. Desde entonces, los vecinos aseguran haber vivido situaciones límite, con obras invasivas, cortes constantes y una convivencia cada vez más insostenible, llegando a intervenir en más de cuatro ocasiones la policía y los bomberos.
A lo largo del último año, sus habitantes han organizado acciones reivindicativas tan llamativas como convertir sus viviendas en un auditorio, sacar los muebles a la calle o protagonizar un funeral simbólico “por la muerte de los barrios”, con la banda Biznaga tocando desde los balcones.
Ahora, a juicio de los vecinos, la vía judicial es el único camino para frenar "una escalada descontrolada de especulación inmobiliaria".