El portavoz de la Santa Sede, el padre Federico Lombardi, ha señalado que el Vaticano "toma nota" de la petición de ayuda que el Gobierno ha formulado a la Iglesia para terminar con ETA y llegar a un acuerdo sobre el futuro del Valle de los Caídos, pero ha insistido en que la Jornada Mundial de la Juventud no es el "no es el lugar correcto donde hablar y obviamente no se van a tomar posiciones sobre estos temas".
Así, durante una rueda de prensa en Madrid, Lombardi ha señalado que efectivamente el ministro de Presidencia, Ramón Jaúregui, comentó la situación de la banda terrorista ETA con el secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, y éste le escuchó "atentamente", ya que en este tipo de eventos se suelen comentar "algunos temas que están encima de la mesa y que son de interés", pero ha reiterado que "no se puede hablar de ninguna decisión explicita por parte del Vaticano".
"Se escuchó con mucha atención, pero sin ningún tipo de posición o respuesta por parte del Vaticano. Hay que profundizar y tratar estos temas, pero no obviamente en un almuerzo de cortesía", ha insistido el portavoz de la Santa Sede en referencia al proceso para acabar con ETA y a un acuerdo de consenso sobre el futuro del Valle de los Caídos.
Respecto al encuentro que ha reunido el Papa con el líder del partido PP, Mariano Rajoy, Lombardi ha señalado que, entre los 7 y 10 minutos que duró la reunión, Rajoy pudo presentar al Pontífice a su mujer y a su hija, pero no ha querido comentar los temas que se trataron.
Preguntado por el motivo por el que el Santo Padre se ha reunido con Rajoy, cuando en otras ocasiones no lo ha hecho con otros líderes de la oposición, Lombardi ha recordado que en 2003 el Papa se reunió con José Luis Rodríguez Zapatero cuando no era presidente del Gobierno. Asimismo, ha puntualizado que Benedicto XVI se ha reunido con Rajoy "como creyente" que "manifiesta respeto a la personalidad del Santo Padre", pero no como "una figura institucional", ya que en España el líder del principal partido de la oposición no ostenta un cargo público como ocurre en otros países, por ejemplo, Reino Unido.