Decenas de perros, algunos de ellos con la familia al completo, gatos y una cobaya han sido los animales más madrugadores que han acudido con sus dueños a hacer cola a la madrileña iglesia de San Antón para recibir la bendición de su patrón en su fiesta grande e incluso agradecerle algún "milagro". "Estaba enferma y San Antón la ha curado", ha contado muy agradecida Pilar, la "abuela" de Molly, una cobaya de cinco años que ha sido el animal más exótico en acudir al templo esta mañana. "Es un milagro, estaba muy grave", asegura.