Otra iglesia en Carabanchel ha sido asaltada. En esta ocasión eran ladrones. El párroco sospecha que se escondieron dentro de la iglesia y esperaron hasta que se cerró.
Profanaron la capilla llevandose objetos de poco valor
Los delincuentes aprovecharon que la Iglesia permanece abierta gran parte del día. El párroco cree que se ocultaron en alguna parte a la hora de comer.
Reventaron de una patada la puerta de la sacristía y robaron casullas, albas, el caliz, algunas patenas, además de otros elementos no religiosos como los micrófonos y hasta una guitarra. Pero además abrieron el sagrario y se llevaron todo, incluidas las formas consagradas.
El sacerdote está recomponiendo como puede lo que necesita para las misas porque asegura que la parroquia apenas tiene dinero para salir adelante. Y se muestra sorprendido por lo robado.
Además intentará reforzar las medidas de seguridad de la parroquia.