Renunciar a tus vacaciones para seguir apagando incendios por España

Haces tu trabajo, cubres tus guardias, tus turnos. Acudes al siniestro. Un incendio doméstico o forestal, una excarcelación tras un accidente de tráfico con atrapados, un rescate de senderistas o escaladores...lo que toque.

Llega el momento de descansar, vacaciones, días libres. Y mientras unos preparan la maleta para irse unos días por ahí, tú y tus compañeros hacéis otro tipo de maletas. Cogéis mangueras, mochilas con rociadores, equipos de protección, herramientas y, de nuevo, con el uniforme y el casco sobre la piel partís a donde se os solicita.

De nuevo ante el fuego. Lejos de casa. Donde sea. Menudas vacaciones...

Desde hace una semana veinte bomberos de la Comunidad de Madrid trabajan junto a otros compañeros de otras regiones y otros países en la extinción de diversos incendios, aún activos, en la provincia de León. Han renunciado a sus días libres. No es la primera vez. No será la última.