Agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil han recuperado un total de 127 reptiles de hasta 54 especies diferentes, entre víboras, cobras o crótalos, todos ellos destinados a su venta ilegal en un domicilio de la localidad de Getafe, según ha informado este martes la Jefatura Superior de Policía y la Comandancia de la Guardia Civil en Madrid.
Al menos, 40 de los reptiles son ejemplares venenosos y altamente peligrosos. Miembros del SEPRONA (Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil) en colaboración con personal especializado de la Comunidad de Madrid procedieron a la retirada y depósito de los animales en lugares adecuados.
También se determinó el traslado de los ejemplares venenosos al parque zoológico de Madrid, al requerir antídotos de forma inmediata en caso de picadura o mordedura. Los reptiles fueron descubiertos por agentes de la Policía Nacional cuando acudieron a una vivienda alertados por la comisión de un presunto robo con violencia.
Al llegar al lugar, una de las personas identificadas como presunta propietaria de los animales manifestó que instantes antes un individuo había intentado entrar en el domicilio por la fuerza, rociándole la cara con un spray, motivo por el que decidió huir saltando al patio trasero (hecho que fue advertido por un vecino del inmueble que alertado llamó a la policía).
Cuando los agentes accedieron al domicilio para comprobar que no había nadie en su interior es cuando pudieron constatar la presencia de terrarios, envases y cajas de plástico que albergaban gran cantidad de especies animales.
Los agentes del SEPRONA procedieron a solicitar al propietario de la vivienda la documentación necesaria que acredita y autoriza la tenencia de los citados animales, no pudiendo ser ésta aportada por el mismo en el momento.
Asimismo, los citados animales se hallaban dispersos por la vivienda en depósitos que los albergaban sin ningún tipo de medida de seguridad a pesar de estar catalogados de acuerdo a la Ley 50/99 como animales potencialmente peligrosos, al ser susceptibles de causar la muerte o lesiones a las personas o a otros animales.
Dos personas fueron identificadas (uno de ellos el propietario de la vivienda) como presuntos propietarios de los animales. Los agentes continúan las investigaciones para determinar si la tenencia de éstos se ajusta a la normativa vigente o son responsables de una sanción de carácter administrativo o incluso de la comisión de un presunto delito contra el medio ambiente.
En este sentido se alerta a la ciudadanía del peligro que supone la tenencia y abandono de determinadas especies de origen exótico. Adquirir este tipo de animales supone que debe hacerse con la correspondiente licencia, cuya carencia es motivo de una infracción administrativa, han recordado desde la Policía.