La Policía obliga al bús tránsfobo a salir de la Complutense entre gritos y tensión

  • Junto a HazteOir, han acudido varios representantes de Vox
Tensión y gritos en la Complutense tras la llegada del autobús tránsfobo
La situación se ha vuelto más tensa y ha obligado a acudir a la Policía Municipal |Telemadrid

El autobús tránsfobo de HazteOir ha sido obligado por la Policía Municipal a abandonar la Universidad Complutense, después de que se produjeran momentos de mucha tensión entre un centenar de personas y los miembros de la organización, sobre todo cuando el decano ha acudido a pedir calma.

El presidente de HazteOir, Ignacio Arsuaga, tenía previsto participar en una mesa redonda sobre libertad de expresión, organizada por un solo estudiante, según ha informado el decano de la facultad, Ricardo Alonso.

Ha explicado que la prohibición por parte de la facultad de realice la citada mesa redonda responde a que este tipo de actos solo pueden organizarse si lo solicita una asociación de estudiantes legalmente inscrita y con representatividad.

Pese a la prohibición, HazteOir ha llevado su autobús al campus, donde ya lo esperaban un grupo de jóvenes con pancartas de "Hazte querer" y gritando consignas como "fuera fascistas de la Universidad", "los ángeles no tienen genitales", "ese autobús es violencia" o "mi cuerpo, mi vida, mi forma de follar".

El vehículo ha tenido que quedar estacionado en un aparcamiento en las inmediaciones de la facultad, y allí se ha dirigido un nutrido grupo de jóvenes, momento en el que ha aumentado la tensión con los miembros de la organización y del partido ultraconservador.

Junto a HazteOir, han acudido varios representantes de Vox, entre ellos su presidenta, Rocío Monasterio, partido que ya había mostrado su apoyo a la campaña tránsfoba de la organización.

A medida que transcurría el tiempo el número de personas ha ido aumentando al igual que los gritos y la tensión, lo que ha obligado al decano y otros representantes universitarios a pedir calma.

"Aquí la gente es libre de expresarse, aunque sea a gritos, siempre que no haya violencia verbal o física", ha dicho en medio del revuelo el decano, a quien un hombre de mediana edad le ha roto los botones de la camisa al intentar sujetarle.

La policía ha tomado declaración al hombre así como a un joven que ha lanzado una lata al bus cuando abandonaba la universidad.