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Ayer les mostramos duras imágenes de un atraco en una pequeña tienda de Pueblo Nuevo. El ladrón agredió con la culata de la pistola al encargado y, harto de los lloros de un niño de 13 años, le propinó una patada y lo arrastró por el local. La Policía busca al atracador del que se sabe que es español y tiene poco más de 30 años.

Los investigadores están sorprendidos por la brutalidad con la que se empleó llegando incluso a patear el cuerpo a un niño de 13 años.

Se trataba de un hombre encapuchado entró a robar el pasado martes en una tienda de Madrid, de la que se llevó 4.000 euros y 50 teléfonos móviles tras amenazar con una pistola a los empleados y clientes.

Según ha confirmado la Jefatura Superior de Policía, el suceso ocurrió el pasado martes pasadas las 21.00 horas, cuando un hombre entró en la tienda City Services, ubicada en el número 5 de la calle Doctor Vallejo, amenazó con un arma a las personas que había en la misma y huyó con un botín.

Uno de los responsables de la tienda, Luis, ha relatado que el suceso ocurrió sobre las 21.15 horas del martes, cuando en el comercio había cuatro empleados y cuatro clientes -una pareja con un niño y una joven-, y el cierre estaba casi totalmente bajado, ya que únicamente quedaba entregar unas fotos a estas personas.

Un individuo que utilizaba una sudadera con capucha y que se había tapado la boca y la nariz con un pañuelo se coló por debajo del cierre y sacó un arma, exigiendo a los empleados que le dieran todo el dinero de la caja fuerte, lo que hicieron.

A continuación exigió que le abrieran una vitrina en la que había numerosos teléfonos móviles, pero uno de los empleados se equivocó y le dio una llave que no era la adecuada, lo que provocó que el hombre pusiera la pistola en la cabeza a varios de los empleaos y les golpeara en la cara con el arma.

También dio una patada al niño, de unos diez años, que estaba en la tienda junto a sus padres, con tal fuerza que los empleados pensaron "que lo podía haber matado", ha explicado Luis.

Antes de huir con los 4.000 euros que había en la caja y 50 teléfonos móviles, el ladrón dijo a los empleados y clientes de la tienda que si salían de la misma en los siguientes minutos les pegaba un tiro.

Luis ha destacado que "todo ocurrió muy rápido, en unos tres minutos, aunque se hizo muy largo", y ha criticado que, aunque él activó la alarma aprovechando que el ladrón les obligó a tirarse al suelo, la policía tardó unos veinte minutos en llegar.

Las cámaras de seguridad han grabado lo ocurrido y la policía analizará las imágenes para tratar de identificar y detener al autor.