La Policía Municipal de Madrid interviene 310 kg de carne y 10 de pescado en un establecimiento de Usera. El dueño será investigado como presunto autor de un delito contra la salud pública, debido a las lamentables condiciones higiénico-sanitarias del local.
Agentes de la Unidad Integral del Distrito de Usera que realizaban inspecciones a establecimientos dedicados al comercio de bebidas y comidas procedieron a comprobar el estado de una carnicería-bazar-tienda de alimentación en el nº 3 de la calle Nicolás Usera.
Grave negligencia sanitaria
Durante el desarrollo de la inspección, los policías observaron graves infracciones y negligencias en materia higiénico-sanitaria, cámaras que no funcionaban, productos cárnicos depositados en carros de la compra a temperatura ambiente, carne y pescado en congeladores sin sistemas de envasado y con la cadena de frio rota.
Los alimentos estaban decolorados, en contacto con las paredes del aparato congelador y llenos de escarcha, careciendo totalmente de elementos de extinción de insectos y planes de prevención de desinfección, ya que se observaron insectos en el interior de las cámaras frigoríficas.
Suciedad por todos lados
Según manifestaciones del dueño, congelaban piezas de carne para luego poder cortarlas mejor, hecho este totalmente prohibido por la normativa en materia de consumo.
También se detectó que los elementos de pesaje no habían pasado controles de metrología, así como la falta de capacitación para manipular alimentos. Los elementos para el tratamiento y despiece de la carne, como tablas y cuchillos, presentaban un alto grado de suciedad con restos orgánicos en descomposición.
Los agentes informaron al dueño de que iba a ser denunciado e investigado por un delito contra la salud pública, quedando precintados los 310 kilogramos de productos cárnicos frescos y congelados y los 10 kilogramos de pescado fresco en estado de congelación, todo ello a disposición de la Autoridad Municipal en materia de sanidad.