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La Policía Municipal de Madrid contará a partir de ahora, en coincidencia con el nombramiento de Francisco Caletrio como nuevo inspector jefe del cuerpo, con una unidad de Vídeo Seguridad y otra de Atención al Turismo, de acuerdo a la reorganización aprobada por el Gobierno de Ana Botella.

Como ha explicado el delegado del Área, Enrique Núñez, en declaraciones en un acto municipal, la Unidad de Vídeo Seguridad se ocupará de gestionar las casi 11.500 cámaras de vigilancia distribuidas por la ciudad para garantizar la seguridad de madrileños y visitantes, una cantidad solo superada en Europa por Londres.

Núñez ha indicado que numerosos ejemplos avalan la efectividad de estos sistemas de vídeo vigilancia, uno de los más recientes la identificación y posterior localización del presunto pederasta de Ciudad Lineal.

De las 11.500 cámaras de Madrid, 8.000 están instaladas en autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) y están permitiendo reducir el número de hurtos que venían produciéndose en el interior de los autobuses, donde suele haber una alta concentración de personas, ha asegurado el delegado.

En cuanto a la Unidad de Atención al Turismo, su sede se ubicará en la principal puerta de entrada de los cerca de ocho millones de turistas que visitan anualmente Madrid: la Terminal 4 del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.

Además de conseguir así una mejor atención al visitante, se persigue incrementar su sensación de seguridad, mediante el despliegue de puntos fijos de atención policial, cuyos integrantes hablarán algún idioma extranjero.

NUEVA ESTRUCTURA DEL ÁREA DE SEGURIDAD Y EMERGENCIAS

La Junta de Gobierno de la ciudad de Madrid ha acordado modificar la organización y estructura del Área de Gobierno de Seguridad y Emergencias, como consecuencia de la reorganización de la estructura de la Policía Municipal de Madrid, que pasa a partir de ahora a depender de la Dirección General de Policía Municipal, como ya ocurre en otros cuerpos policiales.

El objetivo, según Núñez, es reducir y aligerar esa estructura en aras de una mayor operatividad y agilidad, al incrementar el número de policías y al acercar los órganos de decisión a los agentes.

El nuevo organigrama ha sido posible gracias al acuerdo firmado con las centrales sindicales mayoritarias, que va a permitir la sustitución del personal joven que desempeñaba labores no operativas por personal de edad más avanzada, pasando los primeros a desempeñar su trabajo en las calles.

Así, otra de las novedades es el incremento de unos 80 agentes destinados a los nuevos desarrollos urbanísticos -Valdebebas, Montecarmelo, Las Tablas y Sanchinarro- y para integrar la Unidad de Atención al Turismo.

También de nueva implantación es la Escuela de Policía Municipal, dentro del CIFSE, para la formación y perfeccionamiento de determinadas escalas del cuerpo, y la adscripción de las competencias de vigilancia de edificios municipales, incluidas las desempeñadas por empresas de seguridad privada, a la Dirección General de Policía Municipal.

El número de Inspecciones operativas se reduce de cinco a dos: una Territorial y otra Operativa. La primera consta de cinco subinspecciones diferentes, en función de su localización geográfica (noroeste, noreste, suroeste, sureste y Casco Histórico, ésta última por la propia peculiaridad de éste ámbito territorial).

En cuanto a la Inspección Operativa, subrayar que sus subinspecciones atienden a criterios estrictamente operativos y cuelgan de ella la Judicial y la de Seguridad Ciudadana.

También es una novedad la recuperación de la Compañía de Tráfico y Seguridad Vial, denominación con que el Gobierno municipal ha querido recuperar un concepto histórico, del año 1924, que dependerá directamente del inspector jefe, al igual que la Secretaría General, de la que dependerán las unidades de Vídeo Seguridad y de Atención al Turismo.