La nueva operación Chamartín contempla la construcción de 11.000 viviendas, de las cuales hasta el 37 por ciento serán viviendas protegidas o de uso público, reduce la edificabilidad, recoge la reforma de la estación ferroviaria y el desarrollo de un gran centro de negocios, para lo cual se requerirá la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la capital con la previsión de lograr su aprobación definitiva a finales de 2018.