La directora general de Patrimonio Cultural, Paloma Sobrini, ha visitado este jueves el Cerro de los Batallones de Torrejón de Velasco, declarado Bien de Interés Cultural por la Comunidad de Madrid, donde se está desarrollando una nueva campaña de investigación arqueológica.
La Comunidad de Madrid ha invertido desde el año 2011 un total de 192.000 euros en este enclave, "uno de los más importantes de Europa, donde se está desarrollando una línea de investigación de vanguardia en el ámbito de la paleontología internacional", ha indicado Sobrini.
El Cerro de los Batallones, descubierto en 1991, es un yacimiento único en España en lo que a restos de la Era Terciaria se refiere.
Al borde de lo que fue un inmenso lago de miles de kilómetros que cubría, no solo la Comunidad de Madrid, sino que llegaba incluso hasta Guadalajara se encuentra este interesante espacio arqeuológico que ha permitido recuperar piezas de enorme interés científico.
Los yacimientos paleontológicos del Cerro de los Batallones son un archivo excepcional para documentar la fauna del Mioceno superior. Pocos yacimientos han proporcionado tal cantidad de fósiles, tan completos y tan bien conservados. El Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) empezó a excavar en ellos hace ya 24 años y aún es mucho lo que queda por descubrir.
Visitar este lugar es retroceder nueve millones de años en el tiempo, es eliminar de golpe todo rastro humano: carreteras, viviendas, cultivos, etc., y es evocar a partir de una vértebra, de un fémur o de un cráneo, toda una comunidad viva que nos precedió: animales tan fascinantes como jirafas, rinocerontes, mastodontes, perros osos o tigres dientes de sable. Batallones nos enseña muchas cosas, pero sobre todo es una ventana abierta a la evolución y a la coexistencia de grandes carnívoros.
Las sucesivas campañas de excavación llevadas a cabo desde el año 2000 en colaboración con el Museo de Ciencias Naturales, dependiente del CSIC y la Universidad Complutense de Madrid, han permitido reconstruir el medio natural de la Comunidad de Madrid hace nueve millones de años.
Las excavaciones han recuperado hasta el momento más de 10.000 restos óseos correspondientes en su mayoría a animales carnívoros, además de un conjunto faunístico formado por más de 11 especies como tortugas gigantes, mastodontes y jirafas.
LA FUENTE DE LA TEJA Y EL CASTILLO DE PUÑONROSTRO
Además del Cerro de los Batallones, la directora general de Patrimonio Cultural ha visitado a lo largo de esta mañana los trabajos de restauración de la Fuente de la Teja, así como el castillo de Puñonrostro, declarados Bienes de Interés Cultural de la Comunidad de Madrid.
El proyecto de la Fuente de la Teja, que se enmarca en el Plan de Fuentes de la Comunidad de Madrid, tiene una inversión prevista de 62.596 euros para recuperar este bien del siglo XIX, interesante tanto por su antigüedad como por su singular configuración.
El castillo de Puñonrostro, por su parte, es una construcción defensiva erigida en torno al siglo XV.
Se trata de uno de los máximos exponentes de la arquitectura defensiva de la Comunidad de Madrid, y la inversión prevista para sus próximas obras de restauración es de 423.905 euros.