David Marjaliza -"conseguidor" de la trama Púnica y amigo de uno de los principales imputados, el exconsejero madrileño Francisco Granados- se embolsó 4.476.013 euros entre 2004 y 2006 a través de facturas falsas por servicios que presuntamente no se prestaron y que fueron cargadas a sociedades vinculadas a él.