Un perito ha declarado en el juicio por la tragedia del Madrid Arena que Madrid Espacio y Congresos (Madridec), la empresa municipal que gestionaba el pabellón, no activó los mecanismos de alarma de los recursos existentes para hacer frente a la fiesta organizada por Miguel Angel Flores en la que fallecieron cinco jóvenes.
Este experto ha contestado así a las preguntas acerca de las funciones específicas del técnico de operaciones de Madrid Espacios y Congresos (Madridec), José Ruiz Ayuso.
Ruiz Ayuso es uno de los imputados en el juicio. En su declaración, negó que fuera el jefe de Emergencias de Madridec y aseveró que nadie le comunicó que debía de encargarse de esa función. El fiscal acusa a Ayuso de no dar la voz de alarma para la utilización de las salidas de emergencia.
Según el testigo, Ruiz Ayuso tenía encomendadas funciones de jefe de Emergencias y de otras tareas. "Tenía encomendadas funciones incompatibles con su cargo de jefe de Emergencias", ha dicho y ha recalcado que el plan de autoprotección establecía la jerarquía del evento, algo que se debía de comunicar.
Además, ha dicho que no es normal contemplar un sobre-aforo como causa de emergencia, ya que se trata de hacer un plan preventivo de control de acceso por espacio y por zonas.
"Es difícil que figuren todas esas posibilidades. Un plan de control de acceso está incluido en el plan de seguridad", ha reseñado. A preguntas de uno de los abogados de la acusación particular sobre si el plan de autoprotección contemplaba el control de accesos, ha respondido que en el interior no se contemplaba.
LA JEFA POLICIAL NEGÓ QUE SE ESTUVIESE PRODUCIENDO UNA AVALNCHA
También hoy en el juicio se ha podido escuchar una grabación de voz de la noche de la tragedia del Madrid Arena que ha revelado cómo la jefa policial, Cándida Jiménez, aseguraba que no estaba habiendo ninguna avalancha en el recinto, sino que se habían producido "dos paradas muy seguidas" a causa del "consumo de alcohol y otras sustancias".
En una nueva sesión de la fase pericial de la vista oral que se celebra en la Audiencia Provincial de Madrid, se han escuchado los diferentes avisos de la Policía y el Samur de la avalancha ocurrida el 1 de noviembre de 2012 en la que murieron cinco chicas, así como alguna llamada de los propios asistentes a la fiesta.
En concreto, se puede oír cómo la jefa policial del dispositivo del Madrid Arena, Cándida Jiménez, atribuía las paradas cardiorrespiratorias de dos jóvenes a la mezcla de alcohol con otras sustancias. "Aquí no ha habido avalancha", aseguraba Jiménez.
Frases de alerta como "tenemos un marrón en el Arena", "la situación está muy grave", "no disponemos de efectivos" o "tenemos un jaleo tremendo que no sé cómo vamos a solucionar" han sido una constante en la sesión de hoy. Policías municipales avisaban de "una avalancha tremenda de público" e intentaban buscar a Cándida Jiménez, a quien también se la oye comentar: "Tengo un problema porque yo me tengo que ir a las cinco".
Ha declarado también en el juicio en calidad de perito el arquitecto Jorge Murta, quien ha asegurado que el pabellón no tenía capacidad de evacuación ni de control de aforo en base a la normativa vigente y que "no se podía celebrar una fiesta en esas condiciones".
El arquitecto ha destacado que el Madrid Arena tiene un defecto de origen, ya que solo alberga una evacuación operativa y que el recorrido hacia la salida era muy largo y estaba fuera de la normativa. Mañana, comparecerán los médicos forenses que practicaron las autopsias de las niñas. Los informes concluyeron que fallecieron por aplastamiento como motivo de la avalancha en uno de los vomitorios del pabellón