La Comunidad de Madrid recuerda, en la orden publicada en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid, este jueves, en el que se establecen la medidas preventivas para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por la Covid-19, que el uso de la mascarilla provista de válvula expiratoria sólo debe ser usada por profesionales sanitarios para los que está recomendada, no debiéndose ser usada por el resto de los ciudadanos.
Asimismo, la orden establece el uso obligatorio de la mascarilla, para todas las personas a partir de los seis años en la vía pública, en espacios al aire libre y en cualquier espacio cerrado de uso público o que se encuentre abierto al público, con independencia del mantenimiento de la distancia física interpersonal de seguridad.
Además, se remarca que en caso de que sea imprescindible abandonar el domicilio, se "deberá utilizar mascarilla en todo momento, realizar la higiene de manos con frecuencia y evitar al máximo las interacciones sociales".
La orden establece que el uso de la mascarilla, no obstante, no será obligatoria, en el momento de realizar actividad deportiva al aire libre siempre que pueda garantizarse el mantenimiento de la distancia de seguridad, durante el consumo de bebidas y alimentos., en los espacios de la naturaleza o al aire libre fuera de núcleos de población o en las las piscinas durante el baño.
No obstante, la orden incide en que se recomienda su uso, como medida de precaución, en los espacios privados, tanto abiertos como cerrados, cuando existan reuniones o una posible confluencia de personas no convivientes.
La mascarilla, se recuerda, debe cubrir desde parte del tabique nasal hasta la barbilla.
En la exposición de motivo de dicha orden, que afecta al cierre del ocio nocturno, hostelería, a la prohibición de fumar en espacios públicos o nuevas limitaciones en las visitas de familiares a las residencias, se señala que desde que expiró la vigencia del estado de alarma, se ha generado nuevas cadenas de transmisión del SARS-CoV-2, cuya incidencia nacional registrada en la segunda semana de agosto ha sido casi seis veces la observada en el mes de junio.
En concreto,dice la orden, "los brotes detectados en algunos ámbitos concretos como los locales de ocio mayoritariamente nocturno (...) generan un número de casos importante y suponen el inicio de una transmisión comunitaria que requiere de la toma de medidas de control.