El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ha pedido hoy que no se olviden las "imágenes de vergüenza" del Holocausto de muestran "lo que un hombre puede hacer a otro hombre", y ha dicho que conmemorar a los supervivientes pasa por luchar contra la discriminación "en cualquier lugar del mundo".
La Asamblea de Madrid ha acogido, por decimocuarto año consecutivo, un homenaje con motivo del Día de la Memoria del Holocausto y la Prevención de los Crímenes contra la Humanidad al que han asistido, entre otros, los embajadores de Israel y Alemania, representantes de las Embajadas de Polonia, Hungría, Austria y Suecia, la delegada del Gobierno en Madrid, varios consejeros del Gobierno madrileño y diputados y alcaldes de la región.
Un acto que este año ha estado dedicado a Janusz Korczak, médico, pedagogo y escritor, precursor de la lucha en favor de los derechos y la igualdad de los niños, que murió en agosto de 1942 asesinado en el campo de exterminio alemán de Treblinka.
Ignacio González, durante su intervención, ha destacado que cuando se descubrió lo que los nazis habían hecho con los judíos también se descubrió que aquel "infierno no estaba en manos de terroríficos demonios, sino de hombres normales", y el mundo sintió "rabia, estupefacción y sobre todo vergüenza por lo que un hombre puede hacer a otro hombre".
Cuando se habla de millones de judíos muertos, ha añadido, la cifra "resulta abstracta", pero ha afirmado que si se dedicase un día para recordar a cada uno de los que murieron asesinados por los nazis "se necesitarían más de 16.000 años".
Para renovar el compromiso con las víctimas y que no vuelva a suceder algo así, ha continuado, hay que recordar, "y conmemorar es luchar contra la discriminación por motivos de sexo, raza o religión en cualquier lugar del mundo, es luchar por la libertad y los derechos humanos".
Alón Bar, embajador de Israel en España, ha subrayado que las "atrocidades" contra los judíos "no fueron cometidas por animales, monstruos o locos", sino que "son parte del comportamiento humano", y ha avisado de que "en tiempos de crisis hay personas que pueden hacer cosas que en otros momentos son inaceptables e inimaginables".
Y estas actitudes surgen, ha dicho, con cosas que a priori "no parecen muy importantes", como los mensajes de odio que trasladan los dirigentes de un partido político muy pequeño, o las actitudes violentas de un pequeño grupo de jóvenes.
"Si tenemos los ojos en otro lado, si toleramos esto en nuestra ciudad, región, país o en otros países, se puede crear el ambiente que luego permite liberar esa parte de nuestra capacidad humana de cometer atrocidades", ha advertido.
Por su parte, el presidente de la Asamblea, José Ignacio Echeverría, ha coincidido en que el actual deterioro de la situación internacional crea un terreno "cada vez más abonado para los mensajes extremistas y para todos aquellos que necesitan una víctima propiciatoria, para confundir conciencias y poder dar rienda suelta al odio que llevan dentro".
"No podemos tolerar esta deriva, no podemos permitir que este mal se extienda, porque si nos cruzamos de brazos seremos cómplices por omisión en los crímenes futuros, tal y como sucedió en los años 30 y 40", ha avisado.