Juan Mari Arzak lo ha resumido en una frase: "Sin Madrid Fusión los cocineros no seríamos absolutamente nada". Es el reconocimiento que tanto él como algunos de sus colegas han hecho hoy a la cumbre internacional gastronómica que ha festejado su 15 edición, tarta y brindis incluidos. Comenzó en 2002 como un congreso "muy pequeño, en un escenario efímero que daba miedo que se cayese" hasta llegar al auditorio del Palacio Municipal de Congresos, ha recordado su promotor, el periodista gastronómico José Carlos Capel, y durante estos tres lustros ha traído a la capital a los mejores cocineros del mundo.