El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha afirmado este miércoles que si es el candidato del PSOE a la Alcaldía de Madrid en 2015 "aconsejaría que Madrid no se presentara en una cuarta ocasión" a la candidatura para ser sede de los Juegos Olímpicos.
"Mi deseo es presentarme a las primarias del PSOE en Ayuntamiento de la capital y mi opinión, si yo fuera candidato elegido por mis compañeros del PSM, aconsejaría que Madrid no se presentara en una cuarta ocasión", ha destacado el socialista en rueda de prensa en la sede del Ayuntamiento de Madrid.
"Con tres ya basta. Ahora mismo hay que buscar salida a estas instalaciones que están a medio hacer, seguir apostando por este proyecto olímpico es empecinarse, se pinchó la burbuja inmobiliaria y ahora se ha pinchado la burbuja olímpica. Hay que pasar página desde el punto de vista de cambiar el chip", ha añadido a renglón seguido el que fuera secretario de estado para el Deporte preguntado por si considera que Madrid debe volver a presentarse para ser sede de los Juegos.
ANA BOTELLA
En cuanto al futuro de la alcaldesa de la capital, Ana Botella, después de que Madrid no haya logrado ser elegida como sede para los próximos Juegos, Lissavetzky ha afirmado que no va a pedir la dimisión de Botella "porque no se haya conseguido Madrid ciudad olímpica".
"Esto no es, a mi modo de ver, razón para pedir la dimisión de Ana Botella", ha insistido el socialista, quien no obstante, ha considerado que o la alcaldesa "cambia el chip" y no se sume en la "melancolía" o el futuro va a ser malo para ella y para los madrileños.
En su intervención, el socialista ha señalado que no va a "hacer sangre", lo cual no quiere decir que con eso busque "evitar responsabilidades". En este sentido, ha defendido que "se ha aprobado un proyecto y se ha apoyado" y ha insistido en que "hay que ser leal" y no va a pedir la dimisión "porque no se haya conseguido Madrid ciudad olímpica".
Por último, el portavoz municipal ha considerado que "este año y medio" que queda hasta las elecciones de 2015 "va a ser difícil para Ana Botella", pero "no como persona, sino para el PP en la Comunidad y en Madrid" en el caso de que no sean "capaces de cambiar la percepción de la sociedad madrileña" e impulsen políticas "diferentes a las de recorte".
PIDE A BOTELLA QUE DESTINE A LA CIUDAD EL DINERO PREVISTO PARA LOS JJOO
Jaime Lissavetzky ha pedido al Ayuntamiento de Madrid que a partir de 2014 invierta en la ciudad y en los ciudadanos el presupuesto que tenía previsto para los Juegos Olímpicos. En una rueda de prensa en la que ha analizado el inicio del curso político, Lissavetzky ha dicho que por haber perdido Madrid las Olimpiadas no pedirá el PSOE la dimisión de la alcaldesa, Ana Botella, algo que -ha dicho- ya le pidió en el caso 'Madrid Arena' y en el que ella "no estuvo a la altura de las circunstancias".
No obstante, a continuación sí ha lamentado la "gestión global" de la alcaldesa, que ha considerado "muy negativa para los intereses de Madrid y de los madrileños". Con respecto al presupuesto que las tres administraciones habían destinado para los JJOO 2020, Lissavetzky ha afirmado que este debe ser destinado ahora "a los problemas reales de Madrid" y ha informado de que su grupo presentará los días 24 y 25 en el Pleno de la Asamblea una proposición para incidir en esta idea y en otras propuestas ya hechas en junio pasado.
Jaime Lissavetzky le ha pedido al Ayuntamiento que si había 1.575 millones de euros de las tres administraciones destinados a las Olimpiadas, que hable con los gobiernos Central y de la Comunidad para que trasladen esos presupuestos a la capital. Que ese dinero y la tercera parte correspondiente a Madrid, 525 millones que iban a ser invertidos a lo largo de siete años en anualidades de 75 millones, "empiece a ser gastada en 2014", ha dicho.
Ese dinero, según Lissavetzky, podrá ser destinado a la elaboración de planes contra la exclusión social y la pobreza y por el empleo, para la limpieza y para la promoción turística de la ciudad y para promover la actividad física y el deporte.
Según el portavoz, como Botella se quede instalada "en la melancolía, será malo para ella y para los madrileños". Lissavetzky ha manifestado que no es momento de "más lamentaciones" y ha asegurado que las miras deben ser puestas "en el futuro", pues Madrid debe "cambiar su modelo de crecimiento", que hasta ahora sólo ha generado "desequilibrio territorial y social".