El objetivo es acercar estos lugares a sus vecinos dentro del plan para recuperar cascos antiguos con valor patrimonial en municipios de menos de 2.500 habitantes.
Unos trabajos que se prolongarán durante cinco meses en el entorno del parque rural de Nuestra Señora de Orcález.
Entre las rehabilitaciones se encuentra un lavadero del siglo XIX, un emblema de memoria colectiva, uno de los más antiguos de la región.
Para ello se emplean materiales originales como madera o materiales terrizos con el fin de mantener el carácter rural y la armonía del entorno.
Un total de 18 localidades de la región se beneficiarán de este proyecto cuya inversión total ronda los tres millones de euros.