El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha reclamado al Ministerio de Justicia la creación de 89 nuevos órganos judiciales así como la convocatoria de 34 o 35 plazas de magistrados para la región. Así lo ha puesto hoy de manifiesto el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, Francisco Javier Vieira Morante, durante la presentación de la Memoria Judicial 2016, que recoge la actividad de los órganos judiciales de la región desarrollada el pasado año.
Vieira ha recuperado la reivindicación que año tras año reclama el Tribunal Superior de Justicia de Madrid para dotar a la justicia madrileña de 89 nuevos órganos judiciales, 49 para Madrid capital y 40 para la periferia.
Los 89 órganos judiciales quedarían repartidos de la siguiente manera: 27 juzgados de primera instancia, 2 juzgados de instrucción, 12 juzgados de lo penal, seis especializados en violencia sobre la mujer, 22 de lo Social, seis de lo mercantil y 14 mixtos.
Respecto de los magistrados solicitados, cuatro irían destinados a la Sala de lo Civil y Penal del TSJM, dos para los Social, 13 o 14 para las secciones de los Civil de la Audiencia Provincial y 15 para lo Penal de este órgano judicial.
"A pesar del importante esfuerzo que han realizado los jueces en la Capital, de nuevo, un año más, resulta necesario incrementar la plantilla judicial", ha expresado Vieira.
La Justicia madrileña marcha relativamente "bien" por la intensa labor que realizan los jueces madrileños, pero las infraestructuras judiciales de la región se sitúan entre "las peores" de España por sus alarmantes deficiencias. Este es el resumen del panorama judicial que ha hecho este viernes el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, Francisco Javier Vieira.
Vieira ha expresado que están deseosos de que se despeje las dudas sobre si finalmente habrá una Ciudad de la Justicia en Madrid, ya que el asunto está pendiente de un pleito Contencioso-Administrativo que se resolverá en octubre.
En 2016, el número de asunto en trámite se ha reducido en un 14,2 por ciento, muy por encima de la media nacional que lo hizo en un 8,2 por ciento. Influye en este resultado favorable la reducción del número de asuntos ingresados en un 38,9 por ciento, un descenso destacable en la jurisdicción Penal con una bajada de un 49,9 por ciento. Menos acentuada es la reducción en lo Civil, un 17,8 por ciento, en lo Contencioso-Administrativo, un 11,4 por ciento, y un 3,9 por ciento en la Social.
El presidente del TSJM atribuye la drástica reducción de los asuntos penales a la despenalización de las faltas y su transformación en delitos leves, así como en el establecimiento de un límite de seis meses para la instrucción de las causas.
No obstante, los delitos de naturaleza económica y asuntos relacionados con la corrupción están atascando los Juzgados madrileños de lo Penal al darse preferencia en el señalamiento a otros por relevancia del bien jurídico protegido o la existencia de medidas cautelares-.