El hincha del Deportivo de La Coruña y miembro de Riazor Blues Francisco Javier Romero, alias Jimmy, que murió el pasado 30 de noviembre en las inmediaciones del estadio Vicente Calderón, estaba inconsciente pero no en parada cardiorrespiratoria cuando llegaron los equipos del Samur.
Según fuentes jurídicas, los tres sanitarios que han declarado hoy como testigos ante el titular del Juzgado de Instrucción número 20 de Madrid han asegurado que tanto Jimmy como Santiago A.M., el otro seguidor de Riazor Blues que fue arrojado al río Manzanares, ya estaban fuera del agua cuando ellos llegaron al lugar.
Al respecto, han señalado que Jimmy estaba muy grave e inconsciente después de haber salido del agua, aunque no había entrado en parada cardiorrespiratoria, lo que sí sucedió minutos después. De hecho, Jimmy falleció al no superar la parada cardíaca con la que ingresó en UCI del Hospital Clínico de Madrid.
Una de las testigos ha dicho que la zona "era un caos" por todos los hinchas, policías, bomberos y demás personas que había en torno al lugar de los hechos, al que se desplazó en primer lugar un equipo básico compuesto por dos técnicos e inmediatamente después una UVI móvil con una médico, una enfermera y un técnico.
Cuatro de ellos atendieron a Jimmy mientras que una técnico se quedó con Santiago, puesto que estaba "bastante bien". Esta mañana han comparecido tres de los cinco sanitarios del Samur que habían sido llamados por la defensa, mientras que los otros dos no han asistido al encontrarse de baja.
Sin embargo, sus declaraciones -que apenas han durado quince minutos cada una- no han despejado las dudas en torno a quien fue la primera de las dos personas que cayó al río, que es la clave de la investigación. El magistrado Pedro Merchante Somalo afirma que la persona que fue arrojada al río en primer lugar fue Santiago A.M., en contra de la versión policial, que sostiene que se trató de Jimmy.
En este sentido, el juez se basa en la declaración de un agente de movilidad, que llegó varios minutos antes que la Policía Municipal al lugar de los hechos, así como de un taxista que aportó un vídeo que ha sido clave en la investigación.
Por ello, el magistrado acordó hace díez días la puesta en libertad de los cuatro acusados de la muerte de Jimmy, aunque la familia del fallecido ha recurrido su excarcelación al considerar que dos testimonios "no pueden enervar" todo la investigación policial.
Además, la acusación particular ha anunciado que pedirá un estudio antropométrico para determinar las características físicas de las dos personas, puesto que físicamente son muy diferentes, uno pesaba entorno a 60 kilos y otro rondaba los 100.
La defensa sostiene que, en los vídeos aportados por la Policía, la persona que cae al río Manzanares arrojada por cuatro hombres no es Jimmy sino que se trata de otro seguidor del Deportivo, si bien la Policía se ratifica en que esa persona es el hincha fallecido.
Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid han informado a Efe de que las próximas comparecencias serán el 11 y el 18 de junio, cuando -cada uno de esos días- declararán como testigos seis personas que vieron el suceso o lo grabaron. Tras esos doce testimonios se señalará una nueva ronda de declaraciones para la que aún no hay fecha.