La Policía Municipal de Madrid ha intervenido más de 6.500 juguetes incluidos en la red de alerta del Instituto Nacional de Consumo por ser potencialmente peligros por riesgo de incendio, quemaduras, asfixia, intoxicación, contagio microbiológico o transmisión de infecciones en piel y mucosas.
Son pistolas de pompas con luz y jabón, botellines de recambio de pompas de jabón, muñecos de plástico con púas de colores y molinillos voladores con luz, objetos muy reclamados por los menores, según ha informado hoy el Ayuntamiento, que se vendían con un falso certificado de seguridad.
En total han sido 6.553 artículos que se encontraban expuestos al público en un local de venta al por mayor de la calle Magdalena 29, en el distrito de Centro.
Además de estos artículos, también se localizaron 163 unidades de una conocida marca de juguetes, presuntamente falsificados, igualmente expuestos para la venta al público.
Los agentes se presentaron en el local para comprobar si reunía los requisitos legales necesarios para el desarrollo de la actividad comercial y se encontraron que el comercio se dedicaba a la venta al por mayor de juguetes, sin contar con la pertinente licencia municipal.
Durante la inspección se pudo comprobar que ofrecía al público una serie de artículos, que aunque presentaban en sus etiquetas el marcado CE obligatorio y representativo del cumplimento de la normativa europea en seguridad que los habilita para su comercialización, estaban incluidos en la Red de Alertas Sanitarias emitida por el Instituto Nacional de Consumo.
Este hecho prohíbe expresamente la comercialización de estos productos, por lo que el marcado CE está falseado para inducir a error a los consumidores y promover su venta.
La localización del local de la calle Magdalena se produce tras las inspecciones realizadas dentro de la Campaña de Navidad del pasado mes de diciembre en diferentes establecimientos del distrito de Centro, donde se intervinieron mas de 8.000 juguetes catalogados como productos de riesgo en la Red de Alertas del Instituto Nacional de Consumo, de nuevo por los agentes de la Unidad Central de Seguridad 1.
Los artículos intervenidos quedaron precintados a disposición de la autoridad judicial en el almacén del local, instruyendo diligencias en la Comisaría del distrito de Centro, por delitos de estafa, falsedad en código de marcado CE y falta a la propiedad industrial.
