El Hospital del Henares es el primero en España en utilizar el sistema de monitorización "Guardian", que permite detectar alteraciones en las constantes vitales de los pacientes ingresados en planta, evitando así su ingreso en la UCI.
El objetivo del hospital, que ha comenzado a utilizar este sistema recientemente, es vigilar a los pacientes que no reúnen criterios de ingreso en UCI pero que pueden sufrir un deterioro clínico, por lo que se les hace un seguimiento a través de monitores por wifi que avisan de cualquier alteración y permiten una atención más temprana y eficaz.
Con este nuevo sistema informático, el Servicio de Medicina Intensiva de este hospital universitario quiere seguir mejorando su servicio de "UCI sin paredes" y para ello ha formado a todo el personal de enfermería del centroen el uso de los nuevos monitores del sistema "Guardian" de Philips.
Gracias al protocolo de detección precoz de pacientes potencialmente graves "Uci sin paredes", la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital ha reducido el número de paradas cardiacas y ha mejorado el pronóstico de estos enfermos reduciendo la aparición de fallos orgánicos.
De esta manera, se cumple la máxima del Consejo de Resucitación Europeo y del Plan Nacional de Resucitación Cardiopulmonar de la Sociedad Española de Medicina Intensiva de "prevención mejor que resucitación", señala la Comunidad de Madrid en un comunicado.
"FUNCIONA COMO UN SEMÁFORO"
Entre el 4 y el 17 por ciento de los pacientes hospitalizados sufren eventos críticos, incluidas paradas cardiacas, que están frecuentemente precedidos de uno o más signos de deterioro fisiológico y suelen aparecer entre 6 y 8 horas antes de que el evento adverso se produzca.
El jefe de Servicio de Medicina Intensiva del hospital, Federico Gordo Vidal, señala que el sistema de monitorización inalámbrico permite incorporar el control de las constantes vitales a los datos obtenidos de los valores analíticos.
"Con estos sistemas mejora nuestra capacidad de adelantarnos a eventos potencialmente graves en los pacientes de riesgo y administrar tratamientos o tomar decisiones de forma más precoz y por tanto más efectivas", explica.
El sistema "Guardian" funciona como un semáforo que tiene en cuenta diferentes datos como parámetros vitales, mediciones objetivas y valoraciones del personal de enfermería.
Consta de transmisores sin cables que envían la información del paciente, monitores de paciente que registran estos datos y, por último, un software (IntelliVue Guardian Software) al que se transmite toda esta información.
El proceso consta de cinco fases: toma de datos de admisión; toma de constantes al paciente seleccionado; transcripción de datos a su ficha y cálculo del marcador de gravedad; acción de acuerdo con los protocolos establecidos en función del resultado del marcador, y transcripción de datos al sistema de información departamental de planta.
De esta manera, se aumenta la seguridad del paciente, ya que al enlazar las plantas de hospitalización con la propia UCI, se facilita el intercambio de información, reduciendo las estancias innecesarias en la UCI o anticipándolas en caso de necesidad.