Los agentes de la Guardia Civil encargados de determinar las causas del incendio que destruyó ayer el Leroy Merlín de Majadahonda han comenzado hoy su investigación, que prevén que sea larga y difícil, según ha confirmado una portavoz del Instituto Armado.
Una vez que los bomberos de la Comunidad de Madrid han terminado esta noche de enfriar la nave, los investigadores de incendios estructurales han podido entrar esta mañana para realizar su trabajo.
Su objetivo es localizar el foco de inicio del incendio y determinar si fue intencionado o accidental. Para ello se encuentran con varias dificultades, como la destrucción de la cubierta, donde los bomberos señalan que se inició el fuego. "No hay ninguna prisa, pero (la investigación) depende mucho de la estructura del inmueble", ha afirmado la portavoz del cuerpo.
Entretanto, otro equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil ha empezado también hoy a recabar manifestaciones de testigos, sobre todo de personas que vieron el fuego en un primer momento.
El establecimiento, situado en el polígono El Carralero de Majadahonda, comenzó a arder sobre las 23.00 horas del pasado martes, 17 de enero, cuando la tienda estaba cerrada, por lo que no se registraron heridos.
Después de que más de una docena de dotaciones de Bomberos de la Comunidad de Madrid trabajaran toda la noche para impedir que el fuego se propagara a las naves aledañas, su labor durante el día de ayer fue enfriar la nave, de 6.000 metros cuadrados.
En la tienda trabajaban 150 personas, a las que la dirección de la compañía, que quiere reconstruirla lo antes posible, prometió ayer reubicar en otros centros de la región.