En Fuenlabrada hay unas 80 hectáreas dedicadas a esta planta que unos 70 agricultores de la localidad recolectan cada año entre abril y diciembre. La variedad es autóctona y de mucha calidad.
El corte se hace a mano procurando que la penca quede intacta. Es la mejor manera de saber cuál es la estructura de la planta desde la mata.
El agua con la que se riega procede también de pozos de sondeo desde los que se extrae el líquido a más muchos metros de profundidad.
Ahora en plena campaña salen de estas huertas de Fuenlabrada unos 30.000 kilos diarios. Por la tarde se llevan a Mercamadrid y al día siguiente estarán en la mesa de los madrileños.
A pocos metros de estos campos bajo el plástico de los invernaderos ya están plantadas las acelgas que se comercializarán cuando lleguen las primeras heladas.
Los agricultores de esta localidad están buscando una marca de calidad que sirva para vender mejor el producto. Este año la producción es muy alta pero el consumo bajo, así que muchas de las plantas se quedarán en el campo sin recoger.