Este año la Fería de San Isidro cumple 65 años de historia. En cifras supone que se han celebrado 1.200 festejos, con 6.000 reses. Se han cortado mil orejas y han participado más de 500 matadores. Todos hombres, excepto Cristina Sánchez, la única mujer que ha participado en esta Feria.
La de San isidro es de las ferias más conocidas y con más solera. Se dice, que la madrileña es de las aficiones más entendidas y más exigentes. De ahí que los toreros den todo en la plaza porque saben de la proyección nacional e internacional de este coso.
El historiador de la feria, Diego Lechuga, relata en su libro "50 Ferias, 50" las principales anécdotas de esta plaza. Entre ellas destaca la espantá de Curro Romero a un quinto de la tarde que le pareció "avisado". El maestro fue detenido y al día siguiente, que debía volver a torear, lo hizo y salió por la puerta grande. Con todo el torero que más veces ha salido por la puerta grande ha sido "El Viti", y el que más orejas ha cortado ha sido Paco Camino.
El único rabo que se ha cortado en esta feria fue el trofeo que recibió Palomo Linares. Fue en 1972 y estuvo rodeado de polémica, sus detractores se vistieron de negro, al considerar que la fiesta había muerto.
En el coso durante la feria no se ha producido ninguna muerte, pero si fue cogido Antonio González Campeño, de la cuadrilla de Joselito. Falleció a los pocos días como consecuencia de la cogida.
Anécdotas, luces y sombras, de 65 años de historia.