El Ayuntamiento de Madrid no prohíbe los toros como dijo Manuela Carmena pero sí retira la subvención municipal.
En concreto, 61.200 euros sin los que la Escuela de Tauromaquía no puede sobrevivir. La Comunidad de Madrid ya ha dicho que intentará asumir la ayuda.
El torero retirado y codirector de la Escuela de Tauromaquia de Madrid José Miguel Arroyo, "Joselito", acusa a la alcaldesa de la capital, Manuela Carmena, de querer cerrar de manera "dictatorial y cínica" una institución en la que "desde hace casi cuarenta años se forman toreros y personas sobre profundos valores éticos".
En una entrevista con Efe, el diestro madrileño se refiere así a la decisión del gobierno municipal de Ahora Madrid de retirar en junio de 2016 la subvención de 61.200 euros que el ayuntamiento concedía a este centro pionero en su género y que les fue comunicada el pasado miércoles por la concejala de Cultura, Celia Mayer.
"Porque les da la gana, esta gente nos quita de un plumazo la subvención y nos quiere echar de la Venta del Batán, donde la escuela lleva instalada treinta años", explica Joselito, a quien la decisión le parece "un atropello y un abuso de autoridad más propio de una dictadura que de quienes dicen ser progresistas, amantes de las libertades y defensores de las minorías".
Sobre la también prohibición expresa del nuevo ayuntamiento de que se lidien reses en dicho recinto de la Casa de Campo para evitar el "maltrato animal", el torero madrileño argumenta que "primero habría que ver lo que cada uno entiende como maltrato".
"Porque a mí -continúa- me puede parecer maltrato tener un perro encerrado en una casa de cincuenta metros cuadrados durante toda su vida. Esa es sólo una excusa barata para echarnos de allí, porque hace ya mucho tiempo que en la placita del Batán no se ha soltado una sola becerra, ni para tentaderos ni para clases prácticas".