Agentes de la Policía Nacional han detenido a cinco personas en dos operaciones contra grupos especializados en sustracciones al descuido en locales de joyería, ha informado la Jefatura Superior de Policía en un comunicado.
Los detenidos, de edades comprendidas entre los 22 y 51 años, son especialistas en este tipo de ilícitos, aunque no dudaban en emplear la violencia o intimidación si no lograban su propósito.
En la primera de las operaciones se pudo determinar que desde principios del año de 2011 se venían produciendo, tanto en la Comunidad de Madrid como en el resto del territorio nacional, numerosos delitos patrimoniales en establecimientos de joyería.
Los dos arrestados, que eran pareja sentimental y de origen cubano y venezolano, localizaban previamente el local a asaltar llegando a introducirse para verificar las posibles medidas de seguridad de la joyería, número de empleados, calidad del género e incluso la ubicación y accesibilidad a la caja fuerte.
Además, elegían las horas de apertura o cierre al público para cometer los robos. Luego aprovechaban el momento que consideraban más propicio distrayendo a los empleados para sustraer mantas de joyas y el mayor número de género que tuvieran a mano.
Seguidamente huían del lugar en un vehículo aparcado en las inmediaciones y para dar salida a los efectos sustraídos, se los vendían a pequeños peristas o los enviaban a sus países de origen. Una vez localizados fueron detenidos y puestos a disposición judicial.
EL MISMO MODUS OPERANDI
En la segunda operación resultaron detenidas tres personas -dos hombres y una mujer- que actuaban prácticamente igual que el grupo delincuencial anterior. Todos ellos cuentan con numerosos antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio en especial las sustracciones en joyerías.
A finales del pasado mes de febrero, este grupo actuó en una joyería ubicada en el madrileño barrio de Chamberí. Entonces, una pareja accedió interesándose por unas cadenas de oro y otras piezas de joyería, una tercera persona entró más tarde al local y entre todos, lograron que el encargado tuviera que salir al exterior para mostrarle unas joyas del escaparate.
Dicha maniobra sirvió para sustraerle una manta con las cadenas de oro que previamente les había mostrado y que ocultaron entre sus ropas.
Tras tomar declaración al empleado de la joyería y reconocer sin ningún género de dudas a estas tres personas, se estableció un dispositivo con el fin de localizarles. Los agentes les detuvieron y fueron puestos a disposición judicial.
Las dos operaciones han sido realizadas por la Brigada Provincial de Policía Judicial y por agentes de la Comisaría del distrito de Salamanca, ambas pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
