La Policía ha desarticulado un grupo especializado en asaltar establecimientos comerciales, principalmente perfumerías y salones de juego, al detener a cuatro de sus miembros, de nacionalidad rumana, tras una persecución por la A-1 cuando trataban salir de España después de robar en un bar. Los arrestados ocultaban la mercancía sustraída en un trastero de Azuqueca de Henares (Guadalajara) -localidad en la que cometieron su último asalto-, y pocas horas después de los robos la enviaban a través de un servicio de paquetería a Rumanía, donde era vendida en el mercado ilícito.
Se calcula que el grupo desarticulado pudo haber obtenido con esta práctica unos beneficios superiores a los 200.000 euros. A los cuatro detenidos se les imputan hasta el momento cinco robos con fuerza en Zaragoza, Toledo y Guadalajara. Tras su último robo con fuerza, cometido en un bar de Azuqueca de Henares, los integrantes de esta banda huyeron por la A-1, con la intención de abandonar el territorio nacional.
Los investigadores coordinaron un complejo dispositivo de seguimiento que permitió finalmente interceptarles en San Sebastián, donde fueron detenidos y les fueron intervenidos los efectos robados. La organización estaba perfectamente organizada y estructurada, llegando incluso los más veteranos, a someter a represalias y castigos a otros miembros si no cumplían correctamente con las tareas que les eran encomendadas.
Así, si uno de los integrantes del grupo no advertía con suficiente anterioridad al resto del grupo de la inminente presencia policial era abandonado en el lugar de los hechos, como castigo a su negligencia.
En el transcurso de la operación se practicaron tres registros domiciliarios en Azuqueca de Henares en los fueron intervenidos, entre otros efectos, dinero en efectivo procedente de los robos en establecimientos de hostelería, perfumes valorados en miles de euros, una caja fuerte forzada, herramientas y numerosas etiquetas de prendas de ropa de una conocida marca.