El 29% de los trabajadores secunda los paros del metro, con servicios mínimos del 50%, según la empresa. A primera hora ha sido detenido un piquete tras increpar a un agente que intervenía para dejar pasar a un empleado de Metro en cocheras. Es la séptima jornada de huelga en el suburbano madrileño contra la rebaja salarial del 5% que contempla para los empleados publicos, rebajado ya al 1.5%
Un miembro de un piquete informativo de la huelga de Metro de Madrid ha sido detenido este por la Policía por coacciones y atentado contra agentes de la autoridad, que protegían a un empleado que intentaba acceder a su puesto de trabajo, en la séptima jornada de paros en el servicio.
El suburbano madrileño ha registrado hasta las 14 horas de este viernes, coincidiendo con una jornada de paros de 24 horas, un 13% menos de viajeros que el mismo día del año anterior, segun fuentes de la compañía.
Este viernes se celebra la séptima jornada de paros en el Metro con unos servicios mínimos de al menos un 50%, que, según sindicatos y compañía, se están cumpliendo y aunque los intervalos de espera son algo más largos, la incidencia está siendo mínima.
Según la compañía, además, en la jornada de este viernes el 53% de los trabajadores de Metro de Madrid que estaba exento de cumplir servicios mínimos ha acudido a trabajar. Por tanto, el total de la plantilla de Metro, incluyendo servicios mínimos, que ha trabajado asciende al 71%.
Un porcentaje muy alejado del 90% de seguimiento de huelga que han cifrado las organizaciones sindicales, que, por otro lado, han manifestado que la jornada está transcurriendo sin incidentes llamativos.
Metro, sin embargo, destaca la detención por parte de la Policía Nacional este viernes por la mañana de un trabajador que formaba parte de un piquete informativo que, tras intentar impedir el paso a otro empleado de Metro que quería acudir a su puesto de trabajo en las instalaciones de la compañía en Canillejas, se ha enfrentado con la policía. Según la Jefatura Superior de Policía de Madrid, se ha procedido a la detención del piquete, que formaba parte de un grupo de unas 90 personas, por atentado y coacciones contra uno de los agentes de la autoridad que estaba interviniendo en las cocheras para permitir que el trabajador acudir a su puesto.
El vicepresidente y portavoz regional, Ignacio González calificaba "inaceptable y una vulneración de la legalidad" la actuación de piquetes. En este sentido, ha recordado las agresiones que sufrieron cuatro trabajadores en las cocheras de Canillejas cuando se llevaron a cabo los paros sin servicios mínimos. "Frente al derecho a Huelga está el del trabajador que quiere ir a trabajar. Lo otro es una coacción inadmisible", ha puntualizado.
CONTACTOS ENTRE EMPRESA Y TRABAJADORES
Por el momento, Metro de Madrid y el comité de huelga no tienen previsto reunirse en las próximas horas, después de que ayer jueves la dirección de la empresa anunciara que si no se llega a un acuerdo antes de cerrar las nóminas de julio, a comienzos de la semana próxima, "se aplicará una reducción del cinco por ciento sobre los salarios de Junio y Julio", como marca la ley.
El próximo lunes los trabajadores volverán a reunirse en asamblea para conocer los últimos avances de la negociación y decidir si siguen con huelga o no.
Por un lado, los sindicatos y dirección tienen hasta el próximo martes, día 20 de julio, cuando se cierre la contabilidad de las nóminas, para llegar a un acuerdo porque si no es así, se aplicará directamente la reducción del 5% tanto en el mes de junio -- que no se hizo efectiva porque cuando entró en vigor la ley las nóminas estaban ya hechas -- como en el mes de julio.
Esto significa que el trabajador de Metro, con un sueldo medio de 2.000 euros netos, dejaría de cobrar este mes unos 200 euros, a los que se les suma otros 300 euros como máximo que pueden dejar de percibir por haber secundado la huelga los últimos tres días del mes de junio (cien euros menos por día).
Por otro lado, el objetivo es alcanzar la manera de conseguir la aminoración de 7,9 millones de euros a finales de año, para lo que ambas partes han ido concretando partidas (en formación, horas extraordinarias, entre otras) hasta llegar a los 5 millones aproximadamente. De ahí que la última oferta de Metro sea la de reducir un 1,5% los salarios, con los que se conseguirían unos 2,4 millones de euros más de ahorro, y supondría, en la práctica, unos 30 euros menos al mes para el trabajador. Pero al tratarse de sueldos, los trabajadores se niegan a aceptar esta oferta.
Los sindicatos, aseguran, tienen otras ofertas que permiten el ahorro sin necesidad de tocar los salarios pero lamentan que no se les escuche. Desde la compañía, se ha explicado que por normativa, sólo se pueden tratar los gastos de personal y rechazan, por tanto, que por ejemplo, se incluyan en estos recortes, las cantidades que no van a abonarse por la huelga.
Al mismo tiempo este jueves, la Audiencia Nacional ha admitido a trámite el recurso contencioso-administrativo interpuesto por las federaciones del área pública de CC.OO. contra el recorte salarial a los empleados públicos aprobado por el Gobierno socialista en el marco del decreto antidéficit. Según Metro, la Ley de Medidas Urgentes se aprobó para adaptar la Ley de Presupuestos de la Comunidad de Madrid al Decreto del Gobierno central.