Detenidas 33 personas tras desmantelar 13 talleres clandestinos en Carabanchel

  • La Policía Nacional ha detenido a cinco empresarios y a 28 empleados durante un operativo contra la explotación laboral
  • Sometían a los trabajadores a jornadas inhumanas
Detenidas 33 personas tras desmantelar 13 talleres clandestinos en Carabanchel
Detenidas 33 personas tras desmantelar 13 talleres clandestinos en Carabanchel |EUROPA PRESS

La Policía Nacional ha detenido a cinco empresarios y a 28 trabajadores durante un operativo contra la explotación laboral detectada en 13 talleres clandestinos ubicados en el distrito madrileño de Carabanchel, los cuales fueron desmantelados por los agentes.

La inspección en estos locales ocultos se llevó a cabo en septiembre pasado y en ella participaron la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Madrid y funcionarios de la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social, ha informado este la Jefatura Superior de Policía de Madrid.

Desarticulado en Carabanchel un taller clandestino que explotaba a sus trabajadores
Desarticulado en Carabanchel un taller clandestino que explotaba a sus trabajadores
Desarticulado en Carabanchel un taller clandestino que explotaba a sus trabajadores

Desarticulado en Carabanchel un taller clandestino que explotaba a sus trabajadores

Jornadas inhumanas

Los agentes detuvieron a cinco empresarios de entre 38 y 50 años y nacionalidades española o de países de Suramérica, acusados por delitos de promoción de la inmigración irregular y contra los derechos de los trabajadores, ya que sometían a sus trabajadores a jornadas inhumanas.

También fueron arrestados 28 empleados, en su mayoría marroquíes y suramericanos, por encontrarse en situación irregular en España.

Tras las gestiones policiales, los 13 talleres, emplazados casi todos en las calles Secoya y Tórtola, fueron desmantelados por los agentes.

A principios de julio pasado, tres jóvenes, que resultaron heridos graves, provocaron de madrugada un incendio en un taller de costura clandestino en señal de venganza ante los propietarios, indicaron a EFE fuentes policiales.