Agentes de la Policía Nacional han desmantelado a mediados dos narcopisos ubicados en el distrito de San Blas y en la localidad de Alcalá de Henares, que suministraban marihuana y hachís.
Los registros culminaron con la detención de cuatro varones y la incautación de más de cuatro kilogramos de hachís y casi dos de marihuana, además de tres balanzas de precisión y más de 6.000 euros en metálico.
A través de las investigaciones practicas por los agentes, localizaron un punto de venta de sustancias estupefacientes en Alcalá de Henares. Comprobaron que había un trasiego constante de personas, la mayoría jóvenes y algunos de ellos menores, pues el narcopiso se ubicaba en las inmediaciones de un instituto, lo que facilitaba a los adolescentes el consumo.
Los investigadores descubrieron que los presuntos responsables tenían funciones claramente delimitadas: mientras uno vigilaba, el otro se dedicaba a la venta de estupefacientes.
Tras la entrada y registro, los policías intervinieron en el domicilio casi un kilogramo de hachís, más de un kilogramo de marihuana, dos balanzas de precisión y dinero en metálico, por lo que les imputaron un delito contra la salud pública.
Narcopiso en San Blas
Las primeras pesquisas señalaron la ubicación del narcopiso en el distrito de San Blas, donde los agentes pudieron observar una gran afluencia de clientes que esperaban en la vía pública, tratándose muchos de ellos de menores de edad. La venta se producía en el propio portal, mientras otro de los detenidos realizaba labores de vigilancia desde la ventana.
En la entrada y registro, incautaron más de tres kilogramos de hachís, 50 gramos de marihuana, más de 6.000 euros en efectivo, una báscula de precisión y pequeñas bolsas de plástico para la dosificación de la droga.
Por ello, los agentes detuvieron a dos hermanos como presuntos responsables de un delito de tráfico de drogas.