La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a 25 años de cárcel al hombre que mató a su expareja sentimental de 82 puñaladas en su piso de Brunete (Madrid) el pasado año. Así lo han informado fuentes jurídicas, que han indicado que el condenado, Sergio G.M., que ya fue declarado culpable por un jurado popular, es el autor de un delito de asesinato con el agravante de parentesco. Además, según el fallo, el condenado tendrá que indemnizar a las dos hijas de la víctima, Ivana S.F., con 150.000 euros a cada una, a los padres con 30.000 euros y al exmarido de la mujer con 12.000 euros.
Los hechos ocurrieron el 21 de enero de 2010 cuando Sergio G.M. acudió a la casa de Ivana S.F., quien había decidido acabar la relación sentimental que mantenía con él, y éste le asestó 82 puñaladas con dos cuchillos de cocina, una navaja y unas tijeras.
Durante el juicio, que se celebró del 13 al 20 de diciembre, los forenses indicaron que veintiuna de las puñaladas eran mortales y una de las últimas, dirigida al corazón, acabó con la vida de la mujer.
El fiscal, que pidió 22 años y medio de prisión para el agresor, aseguró en una de las vistas que cuando el ahora condenado cometió el crimen "tuvo pleno uso de sus facultades mentales" y recordó que, a pesar de padecer un trastorno mental, los psiquiatras afirmaron que podía distinguir entre el bien y el mal y controlar sus actos.
El abogado de la Federación de Asociaciones de Mujeres Separadas y Divorciadas, Nicanor Herrera, que ejerció como acusación popular, indicó que el ataque fue "bestial", "brutal" y con una desproporción de fuerza "grandísima".
Sin embargo, el letrado de la defensa sostuvo en sus conclusiones que su cliente cometió un delito de homicidio con los atenuantes de trastorno mental y de drogadicción, por lo que solicitó que cumpliera cinco años en un centro psiquiátrico.