El consejero de Medio Ambiente, Administración Local y Ordenación del Territorio, Pedro Rollán, ha desvelado hoy que desde que se impuso la prohibición de baño en La Pedriza se han realizado 27 sanciones en dos años. Rollán se ha desplazado este viernes hasta el Centro de Visitantes de La Pedriza para realizar un balance de las actuaciones llevadas a cabo una vez que ha concluido la temporada estival.
"Durante el 2016 se realizaron 13 sanciones y este año 14 con una media de 400 euros por sanción", ha declarado a los medios de comunicación.
El consejero ha estimado que las medidas adoptadas para incrementar la protección del entorno de La Pedriza están consolidando la recuperación medioambiental de esta zona situada en pleno Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama.
Rollán ha destacado que también se ha puesto en marcha el Plan de Recuperación Ecológica del entorno del Río Manzanares, que, entre otras actuaciones, ha permitido eliminar distintos elementos artificiales del cauce del río, realizar plantaciones para recuperar la vegetación de ribera o señalizar y acondicionar dos senderos alrededor de la Charca Verde.
Además, ha subrayado la labor informativa desarrollada por el personal del Parque Nacional, que durante esta temporada ha resuelto las dudas e informado sobre las medidas tomadas a más de 11.000 visitantes.
"Es un espacio tan bello que hemos comprobado que las medidas que, en un principio generaron tanta polémica, han tenido una repercusión inmediata en el entorno", ha recalcado.
Rollán ha afirmado que la presión puso "en peligro" algunos de estos ecosistemas, pero las medidas puestas en marcha "de manera acertada" han creado un "punto de equilibrio óptimo" que ha generado una "recuperación exponencial en estos últimos dos años".
Los madrileños y foráneos que se acercan a La Pedriza durante los meses estivales cada vez están más concienciados sobre la importancia de cuidar entre todos esta joya natural, según las encuestas realizadas durante este pasado verano a los usuarios de la zona, que señalan que el 75 % ve bien o muy bien la prohibición del baño.
Este porcentaje se eleva hasta el 80 % entre los visitantes habituales, los que acuden más de cinco veces al año, y se dispara hasta el 88 % entre los residentes en las localidades de la zona.