La Comunidad de Madrid retira la Medalla del Dos de Mayo a Granados

  • Blas Labrador, nuevo director de la Agencia de Informática de la Comunidad
  • La Comunidad no ha recibido desde el jueves pasado ninguna petición adicional sobre expedientes

El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha retirado la Gran Cruz de la Orden del Dos de Mayo al exconsejero Francisco Granados tras su implicación en la trama de corrupción autonómica y municipal destapada por la Operación Púnica.

El portavoz del Gobierno regional, Salvador Victoria, ha avanzado en comparecencia de prensa que el equipo de Gobierno ha aprobado la retirada de esta distinción tras su reunión semanal. La regulación de esta distinción prevé que se pueda retirar a quien realice "actos que perjudiquen notablemente la imagen de Madrid y los intereses de la Comunidad".

Francisco Granados recibió la Gran Cruz de la Orden del Dos de Mayo el 30 de octubre de 2013 al dejar su cargo de consejero. Esta distinción que se concede a todos los que han formado parte del Gobierno regional en agradecimiento al trabajo realizado en favor del desarrollo de la región.

LABRADOR, NUEVO DIRECTOR DE INFORMATICA DE LA COMUNIDAD

Blas Labrador Román ha sido nombrado consejero delegado de la Agencia de Informática de la Comunidad de Madrid, cargo en el que sustituye a José Martínez Nicolás, una de las personas implicadas en la Operación Púnica contra la corrupción autonómica y municipal.

El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy el nombramiento de Labrador, que actualmente era secretario general técnico de la Consejería de Economía y Hacienda, y que regresa a la Agencia de Informática, de la que ya fue consejero delegado entre los años 1995 y 2000.

Blas Labrador es ingeniero industrial y tiene un máster de Gestión por ESADE, según ha explicado en rueda de prensa el consejero de Presidencia y Justicia y portavoz del Ejecutivo regional, Salvador Victoria.

Por otro lado, Victoria ha asegurado que la Comunidad de Madrid no ha recibido más peticiones para aportar documentación a la investigación del caso Púnica desde el jueves pasado. "No me consta ninguna petición adicional de ningún nuevo expediente desde el jueves pasado", ha precisado el consejero.

AGUIRRE: NO VOY A DIMITIR POR "UNOS SINVERGUENZAS Y LADRONES" CUANDO YO NO HE ROBADO

Por su parte, la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, tiene claro que "no, no y no" va a dimitir porque haya "unos sinvergüenzas y ladrones" cuando ella no se ha "llevado un duro" en 30 años dedicada a la política y cuando nunca ha favorecido a familiares o amigos. "No me parece que sea el momento de abandonar el barco, cuando parece que se va a hundir", ha reiterado este jueves en una entrevista en la Cadena Ser.

"No veo razón para dimitir", ha declarado para exponer que su "experiencia" le hace válida para lanzar una batería de seis propuestas para atajar la corrupción. Son prisión inmediata sin fianza para los cargos públicos acusados de corrupción; reducción de los tiempos de instrucción; cambios en la Ley Electoral para que el candidato esté más preocupado por la ciudadanía que por su designación; audiorías para los candidatos a un cargo; transparencia en las cuentas de partidos e instituciones y cambios en la Ley de Contratos eliminando el procedimiento negociado sin publicidad.

Aguirre ha asumido su responsabilidad política "in eligendo e in vigilando" pero ha matizado que "no es para dimitir". Otra cosa hubiera sido si "hubiera robado" o se "hubiera enterado de que alguien robaba", pero eso no sucedió.

En este punto ha expuesto que ha nombrado en treinta años de carrera política a "centenares de personas" y que sólo dos, Francisco Granados (Púnica) y Alberto López Viejo (Gürtel), le han "salido rana". "Me salieron rana y me traicionaron", ha lamentado. Los otros alcaldes de la trama G~rtel imputados, los de Pozuelo, Boadilla, Arganda y Majadahonda, ya eran regidores cuando ella llegó.

La popular ha defendido que el fallo en su elección ha sido porcentualmente muy bajo, "un 2 por ciento" de error en una vida política de 30 años y ha añadido que "fallos se pueden tener" y que "uno se puede equivocar hasta en su matrimonio". También ha asegurado que ella no sospechaba ni sabía nada de los tejemanejes de Granados. "Es como cuando a alguien le ponen los cuernos. El cónyuge es el último que se entera", ha lanzado.

BOTELLA: CADA UNO DEBE ASUMIR SUS RESPONSABILIDADES

La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha rechazado pronunciarse sobre si Esperanza Aguirre debería renunciar a la presidencia del PP madrileño por los casos de corrupción, si bien ha señalado que cada uno debe asumir sus responsabilidades.

Preguntada en cuatro ocasiones por los periodistas sobre si cree que la presidenta del PP de Madrid debería renunciar a su cargo y a la carrera por ser candidata a la Alcaldía de la capital, Botella ha dicho que no podía ponerse "en ese supuesto" y que si estuviese en su situación "haría lo que considerase mejor para el partido y para los madrileños", sin concretar cuál es esa opción.

La alcaldesa ha permanecido diez segundos en silencio antes de responder así a la pregunta de qué haría ella si viese que su número dos y su portavoz -con quienes estaba sentada en la rueda de prensa de presentación de los presupuestos- son detenidos por corrupción, tal y como ha sucedido con quien fue el segundo de Aguirre, Francisco Granados.

Momentos antes había descartado pronunciarse sobre la situación de la expresidenta regional alegando que "cada uno es responsable de sus declaraciones" y que los políticos no están para "comentar" las afirmaciones de "otros", si bien al referirse de forma global a la situación política ha defendido que el PP tiene que "hacer la regeneración desde dentro".