El Servicio de Neurología del Hospital Clínico San Carlos ha incorporado en su Unidad de Esclerosis Múltiple una nueva tecnología que permite mejorar el diagnóstico y pronóstico de los pacientes que padecen esclerósis múltiple.
Se trata de la tomografía de coherencia óptica con la que se estudia el nervio óptico que suele estar afectado por esta enfermedad y que consiste en un técnica sencilla, rápida y sin molestias para el enfermo, ya que consiste en una prueba de imagen 'no invasiva' que utiliza ondas de luz para tomar fotografías de la sección transversal de la retina y estudiar así el posible daño del nervio.
Esta Unidad ha incorporado además nuevas áreas con el objetivo de facilitar la mejora asistencial de los pacientes y conseguir una atención multidisciplinar, como la consulta de discapacidad, en la que los especialistas atienden a los enfermos con trastornos de la marcha, fatiga y espasticidad.
También la consulta de planificación del embarazo que atiende a las pacientes que se quieren quedar embarazadas y las sigue posteriormente en el embarazo y postparto, y la de neuropsicología aplicada a esclerosis múltiple que trata los problemas de atención, memoria y concentración de los pacientes.
Por otro lado y en colaboración con el Servicio de Pediatría, ha puesto en marcha la consulta de esclerosis múltiple infantil, debido al aumento de casos de esclerosis múltiple en la población infantil y juvenil.
4.500 CONSULTAS AL AÑO
Coordinada por la doctora y jefe de Sección del Servicio de Neurología, Celia Oreja-Guevara, que dirige el doctor Jorge Matías Guiu, esta Unidad de Esclerosis Múltiple está integrada por 4 neurólogos, 3 enfermeras, 1 neuropsicóloga y una coordinadora de investigación, que cuenta con apoyo de personal administrativo.
En ella se realizan al año más de 4.500 consultas, entre primeras y revisiones, y en la actualidad están siendo atendidos en torno a 1400 pacientes, de los cuales 980 están siendo tratados con las terapias de inmunomoduladores e inmunosupresores de nueva generación.
En esta unidad se está llevando a cabo un aumento del número de proyectos de investigación, entre los que destacan los que hacen referencia a la remielinización y biomarcadores clínicos y de imagen, al tiempo que desarrolla una amplia actividad de investigación clínica con nuevos medicamentos, algunos indicados para las formas progresivas de la enfermedad y otros con potenciales efectos neuroregeneradores, así como ensayos sobre nuevas terapias en neuromielitis óptica.