La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y la de Barcelona, Ada Colau, han defendido una cultura de la paz frente a la violencia machista, un fenómeno contra el que han pedido soluciones, porque a su juicio no se puede seguir tolerando que este fenómeno contra las mujeres no tenga una "respuesta absoluta".
Estas han sido algunas de las consideraciones que han realizado las dos alcaldesas tras reunirse esta mañana en el Ayuntamiento de Madrid junto a otras representantes de consistorios como el de Badalona, A Coruña y Santiago, entre otros, y que marcharán este mediodía por Madrid para pedir que el "terrorismo machista" sea una cuestión de Estado.
Carmena, que ha compartido con Colau el pañuelo morado que la barcelonesa llevaba en solidaridad con las víctimas con la violencia de género, ha mostrado su deseo de que Madrid sea una ciudad de acogida y ha pedido que la marcha se convirtiese en "una fuerza imparable contra la violencia, no solamente contra la de género, sino contra cualquiera".
"Es muy importante que Madrid se convierta en una ciudad para la cultura y la educación contra la violencia, que es como una hidra de muchas cabezas, y es terrible que esta violencia que puede latir en un momento se dirija contra las mujeres", ha comentado.
Por ello, ha considerado que ha llegado un momento en que "no podemos seguir tolerando" y no se debe permitir que la violencia contra las mujeres "siga siendo un fenómeno sin que haya una respuesta absoluta para acabar de una vez por todas con ella".
Para Carmena, la marcha de hoy es "un acto de concienciación, de reivindicación, exigencia y un decir que esto no puede seguir así" porque hay que acabar con esta lacra. Pese a hacer estas declaraciones, la regidora madrileña ha mostrado su deseo de que los medios no recojan sus palabras sino las de los protagonistas de esta marcha.
Carmena ha leído ante las cámaras una poesía extraída de un libro escrito por una joven que estuvo trabajando en una casa de acogida de mujeres, una compilación de poesías que la alcaldesa dice haber leído en el metro después de que la chica se lo pidiese.
Por su parte, Ada Colau ha considerado la violencia machista como la más grave estructural que vive el país y ha criticado que "esté prácticamente silenciada en la agenda oficial, institucional y en las altas instancias".
"Imaginemos que el mismo nivel de cifras de asesinadas y de agredidas lo sufrieran por ejemplo hombres con cargos electos: estaríamos con el país militarizado, estaríamos con el país en alerta de terrorismo seguramente y nosotros no queremos que se militarice el país", ha comentado.
Lo que Colau pretende, al igual que Carmena, es defender la cultura de la paz y que se de prioridad a lo que realmente es importante porque, a su juicio, que se asesine a mujeres cada día en España y no se esté haciendo nada desde las instituciones supone que algo no se está haciendo bien.
La alcaldesa de Barcelona ha asegurado que desde los municipios gobernados por las candidaturas ciudadanas se está intentando dar respuesta a este fenómeno, no sólo destinando más recursos sino también invirtiendo mucho más en prevención, educación y cultura porque en su opinión son los valores que emanan de la "sociedad patriarcal" los que generan las violencias machistas.
Colau, tras valorar la convocatoria de la marcha, ha lamentado que sea una vez más la ciudadanía y los colectivos de mujeres los que prácticamente sin recursos den cada día "la pelea", mientras que, en opinión de la alcaldesa catalana, las instituciones "parece que están en la luna, en marte o en otra galaxia".