Cardiólogos electrofisiólogos del Hospital Universitario Puerta de Hierro Majadahonda han implantado por primera vez en este centro sanitario un marcapasos sin cables, ha informado el centro en un comunicado. Los marcapasos tradicionales cuentan con varios cables, mientras que el nuevo dispositivo no tiene cables, va todo integrado y se coloca en la punta del ventrículo derecho, permitiendo sustituir a un marcapasos monocameral.
Las principales ventajas de este nuevo dispositivo son que presenta un menor riesgo de disfunción asociada al electrodo (desplazamiento, rotura, etc) y un porcentaje menor de infecciones. Estas conclusiones han quedado reflejadas en un estudio publicado en la revista New England tras el análisis de 300 pacientes a los que se les había implantado un dispositivo de estas características.
Actualmente, el marcapasos sin cables está indicado para un determinado tipo de pacientes: pacientes con infecciones previas, con problemas en las válvulas o que no tengan accesos vasculares. Se implantan a través de un catéter y la intervención dura menos de una hora.
En la línea de miniaturización de los dispositivos, el nuevo marcapasos sin cables ofrece, en un dispositivo de 25 milímetros y menos de dos gramos de peso, las mismas funcionalidades que un marcapasos monocameral convencional, eliminando los potenciales riesgos y complicaciones asociados a la presencia del electrodo.
En 2014 este centro fue uno de los primeros hospitales de España en implantar un dispositivo de monitorización cardiaca Reveal LinQ -holter insertable- que es el más pequeño disponible en la actualidad.
Se trata de un tipo de dispositivo un 80 por ciento más pequeño que otros, sin cables y de aproximadamente un tercio del tamaño de una pila normal y que proporciona monitorización a largo plazo, durante más de 3 años y con un 20 por ciento más de memoria que los holter predecesores, para ayudar a los facultativos a monitorizar el ritmo cardíaco y diagnosticar diferentes arritmias.