La Policía Nacional ha desarticulado un grupo formado por nueve personas en Madrid, Córdoba y Albacete que falsificaba obras de autores como Francisco de Goya y Pablo Picasso para venderlas en el mercado negro y se ha incautado de 60 pinturas falsas.
Según ha informado la Dirección General de la Policía, un anticuario de Madrid era quien encargaba a un pintor afincado en Córdoba la confección de las pinturas sin firmar, principalmente de los siglos XVI al XIX, a través de un mediador.
Las obras, que eran distribuidas en el establecimiento de uno de los arrestados, salas de subasta, ferias de antigüedades o directamente a particulares, eran envejecidas y las vendían como auténticas después de dotarlas de certificados falsos firmados por expertos a cambio de una suma económica.
La Policía ha explicado que comenzó la investigación a partir de una denuncia realizada por los titulares de los derechos de la propiedad intelectual de varias obras, tras lo que los agentes averiguaron que el anticuario era quien había puesto en el mercado los cuadros falsos.
Este anticuario comerciaba con todo tipo de piezas artísticas, desde cuadros de autores contemporáneos, copias actuales de tablas que vendía como antiguas, elementos arqueológicos, piezas de marfil labradas o colmillos de elefante en muchos casos de procedencia ilícita.
Los agentes, señala el comunicado, averiguaron que el anticuario generalmente documentaba las obras con certificaciones falsas obtenidas a cambio de dinero o bien emitidas por personas no expertas en esos autores.
Así, la operación ha culminado con la detención de nueve personas, cuatro en Madrid, cuatro en Córdoba y una en Albacete.
Además los agentes han registrado varios domicilios y locales de Madrid y Córdoba, donde se han aprehendido de numerosos certificados falsos, cuatro colmillos de elefante, 30 piezas talladas de marfil, 35 lingotes de oro, una pistola 9mm Parabéllum y 60 cuadros presuntamente falsos.
La investigación se ha llevado a cabo por agentes de la Brigada de Patrimonio Histórico, de la UDEV Central perteneciente a la Comisaría General de Policía Judicial. EFE