139.000 personas en la ciudad de Madrid dependen de la teleasistencia. El servicio es público, gestionado por el Ayuntamiento de Madrid, pero se presta a través de tres empresas privadas.
Según Comisiones Obreras, las empresas están incumpliendo las condiciones previstas en los contratos. La consecuencia: retrasos y deterioro del servicio, con horas punta en las que se acumulan hasta 75 llamadas en espera.
El Ayuntamiento de Madrid niega que se esté prestando un servicio deficiente. Asegura que las auditorías y las encuestas de satisfacción de los usuarios son positivas y apela a la responsabilidad para no generar la alarma entre una población vulnerable.
El Ayuntamiento de Madrid mantendrá una reunión con Comisiones Obreras el próximo martes.
