El Gobierno municipal de Ana Botella ha acordado hoy la supresión de 16 altos cargos, 21 plazas de eventuales y la Oficina del Defensor del Contribuyente, así como 322 plazas vacantes no cubiertas por personal interino y otras 101 previstas en la oferta de empleo público que no se convocarán.
Según ha informado la alcaldesa de Madrid en rueda de prensa tras la reunión semanal de su gobierno, estos ajustes en la plantilla municipal supondrán un ahorro de 18 millones de euros entre este año y el próximo.
Botella ha justificado estas medidas en la necesidad de "ser más eficientes" y "optimizar al máximo los recursos humanos" del Ayuntamiento mediante "un proceso de adelgazamiento de la administración pública".
El Gobierno municipal no ha informado de qué 21 plazas de personal eventual de confianza se eliminan y ha concretado algo más en cuanto a los altos cargos.
Se suprimen en concreto cuatro puestos con rango de dirección general: dos vocales del Tribunal Económico Administrativo y otros dos puestos por la integración de la Oficina de Defensa del Contribuyente en la Coordinación General de Modernización y Administración Pública y de la Dirección General del Paisaje Urbano en la Dirección General de Patrimonio Cultural y Paisaje Urbano del Área de las Artes.
También se reducen cuatro puestos de Subdirección General en el Área de Hacienda y Administración Pública, y ocho de Servicios, cinco en el Área de Economía, Empleo y Participación Ciudadana y tres en el de Hacienda y Administración Pública.
En un segundo bloque del Programa de Medidas de Eficiencia Organizativa aprobado hoy se incluye la amortización en la plantilla presupuestaria de este ejercicio de 322 plazas vacantes no cubiertas con personal interino y la desafectación en las ofertas de empleo público anteriores de 101 plazas anunciadas pero aún no convocadas.
La alcaldesa ha destacado que el próximo año solo se seguirán convocando las vacantes en los cuerpos municipales de policía y bomberos.
La optimización del funcionamiento de determinados puestos de trabajo se llevará a efecto con los técnicos de Administración Especial, subescala técnica, de los distritos.
Esta medida permitirá mayor flexibilidad en la asignación de las tareas en materia urbanística (elaboración de informes, realización de inspecciones), favoreciendo así la polivalencia y versatilidad de este personal de los distritos.
En el caso de las instalaciones deportivas se van a definir unas plantillas tipo para determinar con exactitud el personal indispensable en ciertas categorías para la prestación directa del servicio.
También se van a reordenar los colectivos de personal de oficios de servicios internos (POSI), conductores y oficinas auxiliares.
En el caso de los POSI se asegurarán actividades indispensables y esenciales para la organización administrativa, prescindiendo de las no prioritarias o accesorias.
A través de la movilidad del personal, sin incremento de plantillas, se asegurará la actividad de oficios y servicios internos en los accesos y puertas de dependencias municipales; correo interno; centros de servicios sociales; colegios públicos y museos.
En el caso de los conductores, la reducción se ha venido realizando de manera paulatina pero sigue siendo necesario abordar nuevas adaptaciones de plantilla.
En cuanto a las oficinas auxiliares, se concretarán las funciones y se reducirán las dotaciones en el caso de direcciones y subdirecciones generales y jefaturas de Servicio o análogos, de modo que realicen tareas de forma indistinta y de acuerdo con las necesidades de la organización.
Se ha fijado un índice de absentismo por incapacidad temporal del 5 %, frente al 5,3 % contemplado en 2011.
Botella ha recordado que la plantilla del ayuntamiento y sus organismos autónomos -empresas municipales aparte- la integran más de 29.000 empleados, de los que un tercio forman parte de los cuerpos de seguridad, movilidad y Protección Civil, y que el 84 % son funcionarios, el 15 % tienen vinculación laboral y "solo" el 0,8 % es personal eventual.
Ha subrayado que los 100 puestos directivos actuales representan el 0,3 % de la plantilla y casi el 70 % de ellos son funcionarios de carrera, lo que supone una de las tasas más altas de profesionalización de la función directiva.
APOYO A LAS MEDIDAS DE LA COMUNIDAD
La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha expresado hoy su apoyo a las medidas de reforma sanitaria emprendidas por el Gobierno de la Comunidad.
Botella ha sido preguntada, en rueda de prensa tras la reunión semanal de su gobierno, si apoya las medidas sanitarias impulsadas por el presidente regional, Ignacio González, y la pregunta incluía textualmente la privatización de la gestión de seis hospitales y el cobro de un euro por receta.
Aunque su respuesta ha sido positiva -"yo las apoyo"-, sin entrar en matices, fuentes municipales han precisado después que la alcaldesa no ha mostrado su apoyo al euro por receta, contra el que se ha pronunciado el Gobierno de Mariano Rajoy.
Antes, en respuesta a otra pregunta, Botella ha dicho que no quiere "entrar en los criterios que puedan existir para la reorganización de la sanidad española" y ha destacado que "el presidente del Gobierno apoyó la política sanitaria del presidente de la Comunidad de Madrid", anoche durante la cena navideña del PP madrileño.
Ana Botella ha defendido la necesidad de una reforma que haga "sostenible para el futuro" el actual modelo sanitario "público y gratuito".
En este sentido ha afirmado que "en estos días se están diciendo cosas que no son ciertas" porque la sanidad en España "no va a dejar de ser ni gratuita ni universal", aunque sí se va a organizar "con unos criterios de sostenibilidad que permitan su permanencia en el futuro".
"Es en eso en lo que está trabajando la Comunidad de Madrid", ha asegurado la alcaldesa.